Jugando con fuego [Aizawa x T/N x Hawks] Editandose

Idiota

Habían pasado ya varios días desde que me dejaron en mi casa. Creo que pase la mayor parte de las noches llorando, me dolía todo el cuerpo, no podía dormir, me sentía cansada y triste, siempre creí que era un mito cuando decían que podía romperse tú corazón, sin embargo ahora con cada día que pasaba sin hablar con ellos lo estaba sintiendo.

No había recibo ni una llamada, ni un mensaje y no los había podido ver. En la academia era raro ver a Aizawa, pero estos días ni una sola vez me lo había podido topar, habían citado a todos los alumnos cuando reabrieron la academia para dar indicaciones y se suponía que estaban todos los maestros pero tampoco pude verlo ahí. Ni siquiera había podido ver a Keigo en la agencia, cuando yo llegaba él ya se había ido y cuando me iba aún no volvía. Me estaba evitando y eso me dolía aún más.

Aunque parecía que se estaban alejando de mí, no era totalmente así. Seguían estando al pendiente de mí, el héroe de la agencia con la que estaba trabajando, cada cierta hora recibía mensajes y a veces me preguntaba qué haría después de salir o si ya había comido, claramente toda esa información iba para Keigo. Además que había recibido llamadas de Present Mic preguntando cómo me encontraba.

Pará terminar de empeorar todo, mi padre había llegado a la casa y ni siquiera podía estar triste a gusto.

Tuvimos una discusión por haber dejado  la agencia de mí tío, al parecer mi tío no dijo nada de sus ideas de matrimonio, pero por supuesto que no se cayó de todo lo demás que le dije.

La academia ya había vuelto a la normalidad, habían implementado ciertas medidas para garantizar la seguridad de los estudiantes y varios protocolos para impedir otro ataquen de los villanos de nuevo.

Quería estar todo el día acostada en mi cama. No tenía ganas hacer nada, no quería ir a la agencia, ni a la escuela. No me había sentido nada bien esos días, apenas había pasado la primera clase y ya había tenido que ir al baño a vomitar el desayuno que había comprado en la mañana.

-Mirio: Te ves terrible muñeca.

-T/N: Oh gracias, no lo había notado.

-Mirio: Estos días te has visto mal, pero no había podido hablar contigo.

-T/N: Claro, cómo tú estás en las nubes con Tamaki bebé.

-Mirio: No es verdad, es más me sorprende que no lo hayas molestado por ese día.

-T/N: Yo jamás lo molesto.

-Mirio: ¿Y como se llama a todo lo que le haces?

-T/N: Me gusta abrazarlo y ver sus reacciones, es que miralo (dije mientras volteaba a ver a Tamaki) es la cosita más abrazable que existe.

-Mirio: Es verdad, cuando lo abrazó no quiero soltarlo.

-T/N: Los dos son tan lindos, hace un rato lo caché mirándote durante la mayor parte de la clase, cuando noto que lo estaba viendo le mande un beso y se sonrojo tanto que creí que se iba a desmayar, después durante lo que quedó de la clase no volvió a levantar la mirada.

-Mirio: Así que ¿por eso no se a acercado a nosotros?

-T/N: Puede ser.

Me quede mirando a Takami que estaba concentrado escuchando todo lo que Nejire le decía.

-Mirio: Pero dime ¿por qué estas tan triste muñeca? (dijo mientras me acariciaba la mejilla) ¿Paso algo grave?  ¿Ocurrió algo con tus galanes?

No quería hablar sobre eso, pero tal vez hablandolo me ayudaría, así que le conté a Mirio lo que había pasado.

-Mirio: Entonces ¿terminaron?