Liceanos por obligación // NCT chilensis.

05; cabros de porquería 😤

El día había estado más tranquilo que de costumbre, y eso solo puede significar una cosa:

Va a quedar la cagá en la tarde.

Y efectivamente era así.

Nuestro querido Yuta bajó las escaleras y caminó hasta llegar al casino, era su turno de pedir la colación de la Junaeb.
Se puso en la fila, detrás del Johnny y del Taeil —que esos nunca se separaban— cuando ya retiraron sus cosas, se sentaron en unos escalones a perder el tiempo.

No querían entrar a la sala de nuevo.

— Oigan y si despues vamos a com... — fué interrumpido por el galletón que le llegó en la cabeza — Oe, que weá. — dijo en voz alta, parándose al tiro - ¿Quién fué el conchetumare? ¡Da la cara po, zángano culiao! —.

Mientras que Johnny buscaba con la mirada a la persona que le proporcionó tal golpe a su amigo con esa galleta culiá dura, el Taeil estaba cagao' de la risa.

— ¡Yo po! ¿Qué pasa? A ver po, dime ¡Qué pasa! — dijo un weón que estaba escondido detrás de un basurero de reciclaje, se levantó y se acercó lentamente.

El Yuta salió rajao pa' donde el cabro, iba a decidido a sacarle la chucha.

— ¡Ay, no, espera, perdón! — el loco se devolvió corriendo, estaba cagao' de miedo, sus amigos le dijeron que no se metiera con los de cuarto.

— Náh que perdón acá, peléala po, maricón culiao. — el Yuta lo salió persiguiendo, corrió como naruto.

— ¡Lucas, yo te salvo! — gritó otro weón a lo lejos, arriba de un techo.

Agarró dos galletones que tenía guardados en los bolsillos y se los tiró al Yuta, uno lo esquivó pero el otro le llegó en el brazo.

— ¡¿Oe que te pasa con mi compare?! ¡Baboso culiao! — le gritó el Johnny, parándose a tirarle una caja de leche.

— ¡Cuidao', Hendery! — gritó el Lucas.

No le llegó en el cuerpo, pero chocó en una pared y explotó, haciendo que el uniforme del weón —que ahora saben que se llama Hendery— se manchara.

— ¡Así se hace, amor! — le apoyó Taeil, aplaudiendo.

— ¡¿QUÉ PASÓ?! — gritó el Jaehyun desde el tercer piso, le tocaba salir a los terceros medios para buscar su colación así que debían ir también, él a lo flash bajó por las escaleras y llegó hasta sus amigos de cuarto — Vimos como explotaba una leche de frutilla por la ventana. —.

El más alto iba a contestar, de no ser porque llegó nuevamente el Yuta, pero ahora tenía la polera mojada.

— ¿Qué te pasó, hermano? — ahora preguntó el Taeyong, que venía tomando su cajita de leche de chocolate.

— Un pendejo culiao me tiró un galletón y agua con una botella, no sé que se cree. — respondió, estaba totalmente ofendido.

— ¿Cuál? ¿Ese? - el Taeyong apuntó detrás de él y ahí se encontraba el tal Lucas, quién efectivamente era el que andaba weando al japonés.

Pero eso no era todo, su lindo Sicheng le estaba tirando un pan con chancho por la cabeza.

— ¡Por última vez! ¡Deja de webearme! — le gritó el chinito.

Oh no, Yuta estaba más bravo que el arquero de la selección chilena.

— Ooooh, cagó. — dijo el Jaehyun, que se sentó en el cemento a comerse su galletón y tomándose su leche de frutilla en caja.