— ¿Ya estás mejor? — Kun acarició su mejilla.
— Mmh, la verdad no. —.
— ¿Por? —.
Jennie suspiró, se sentó en el pasto, Kun hizo lo mismo.
— No creo que pueda aguantar más. —.
— Jennie, no digas eso, me estai' asustando. — tomó ambas manos.
— Kunnie, oye, gracias por defenderme y todo, pero estoy chata de pasar por estas cosas. —.
— Jennie, te prometo que-... —.
— No, Kun, no me prometas nada, nada de esto es tu culpa. — lo miró — Voy a sonar muy egoísta, pero creo que lo mejor para mí es que esto se acabe. —.
— N-No, no, no, Nini, escúchame, el Ten ya no te va a molestar más. —.
— No es solo eso, Kun, yo he visto como te poní' con él, y mientras yo esté entremedio, ninguno de los tres va a ser feliz. —.
— Jennie, yo quiero estar contigo. —.
— Porque me quieres, pero no te gusto. —.
— ¿Cómo sabes tú lo que siento yo? —.
— Porque no siento que tu corazón lata tan rápido como el mío. —
Kun bajó la mirada.
— Jennie... —.
— Tranquilo, no tienes que sentirte mal, no me puedo enojar contigo. —.
Su voz se quebró nuevamente, se puso a mirar la carretera, no quería mirarlo si sabía que se iba a poner llorar.
Kun la abrazó inmediatamente.
— Él tenía razón. — sollozó en su hombro — No te atraigo. —.
— ¿Quién te dijo esa weá? — le preguntó con cierto enojo — Jennie Kim, te estoy preguntando algo. —.
— Ten. —.
— ¿En serio? —.
— Sí, tu sabes que no me gusta mentir. —.
— ¿Ya y cuándo? —.
— ... —.
— Jennie... —.
— En el paseo de tu familia, entró a la pieza cuando estaba sola y ahí me dijo de todo, incluso habló de que a mí no me deseabas porque no hemos tenido sexo. —.
— Ay, pero si eso no es totalmente neces-... —.
— Sí, eso le dije porque eso pensaba, pero a él te lo tiraste porque quisiste, en cambio conmigo no pasa eso. —.
— Yo-... —.
— Incluso si me siento arriba tuyo, a tí no te pasa nada, no te dan ganas de hacer nada más cuando estás conmigo, y no te lo digo como reclamo, te lo digo para que te des cuenta. —.
— ¿Darme cuenta de qué? —.
— Que no te gustan las mujeres po'. — se separó para mirarlo a la cara.
Kun no supo que decir.
— Es obvio que le gustai' al Ten, pero aunque fué pesado conmigo, yo sabía que tenía razón, tú me quieres como amiga solamente. —.
— Puta la weá. — se tapó la cara — Intenté evitar el tema porque no quería confundirme de nuevo. —.
— Es que se te nota po', a tí tambien te da celos que él esté intentando algo con el Taeyong, y me fijé que en los recreos miras mucho a los weones que juegan a la pelota, sabiendo que no te gusta el fútbol ni un poco. —.
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Liceanos por obligación // NCT chilensis.
FanficNo se te vaya a ocurrir faltar a clases un día, porque te puedes perder de mucho. Dos weones se agarran a combos, hacen guerra de galletones, alguien hace la cimarra, suspenden al mateo del curso, el más flojo se saca un 7, algún aweonao se saca la...