La mayoría del tiempo el Ten pasaba en la casa del Kun.
Era entretenido, tenía pa' jugar just dance, incontables juegos de mesa, podía comer un montón de cosas ricas, su mamá era entera buena onda —aunque últimamente la notaba rara— pero fuera de todo eso, le encantaba estar con su bestie.
Le encantaba abrazarlo fuerte, darle besitos en las mejillas, dormir con él, hablar con él, y hasta verlo cocinar.
El simple hecho de existir en su vida era lo que necesitaba.
Por eso, cuando comenzó el tema sus celos tóxicos con la Jennie, temió perderlo.
Ya no la molestaba, intentaba evitarla a toda costa, pero aún había algo que no podía evitar y eso era que había logrado meterse al corazón de piedra de Kun.
A él le costó mucho acercarse, Kun era muy piolita, atento en clases, excelente asistencia, anotaciones positivas todo el año.
Mientras que Ten era todo lo contrario, con el Jungwoo webeaban toda la clase si era posible, no tenían malas notas, pero el simple hecho de que los retaban y llamaban a sus apoderados casi siempre era lo que les manchaba la hoja de vida.
Entonces, cuando conoció a Kun, mejoró para bien.
Y ambos en realidad, pero Doyoung era quien más cuidaba de Jungwoo, y Kun cuidaba de Ten y de Sicheng.
Se acostumbró a tener la atención del otro todo el tiempo, tanto así que, de a poquito, se dió cuenta de lo que en realidad le estaba pasando.
Doyoung se dió cuenta, el Sicheng se dió cuenta, hasta su mamá se había dado cuenta, “te atrae el Kun”.
Para Ten eso no era válido, a todo el mundo debería atraerle, si es el hombre que cualquiera desearía tener de pololo.
Se lo repitieron hasta el cansancio, “dile lo que te pasa, él no te va a rechazar”, mas ignoró todo consejo. ¿Para qué se iba a confesar? Si podía estar con él como un amigo, el trato era casi similar a un pololeo y no tendría que hacer escenas de celos.
Pero oh oh, que aweonao nuestro amigo Ten.
La Jennie llegó a la vida de Kun para ponérsela de cabeza.
Empezando por el hecho de que, al enterarse del odio que tenían ciertas personas hacia ella, salió su instinto protector.
¿Porqué debía protejerla, si solo eran compañeros de curso? Ni él lo sabía, pero con el tiempo se fueron acercando.
Ya no tenían que inventar excusas de que “la directiva tiene que ir a comprar esto, la directiva tiene que ir a comprar esto otro” ahora solo salían para todos lados como amigos oficiales.
Hasta ese día que la Jennie le dió un piquito, su corazón con todo y ventrículos se confundió.
Al principio solo la veía como amiga, era re apañadora, simpática, preciosa y encima cantaba bonito, Kun ama las voces lindas.
Su mamá también canta lindo, el Ten también, el Doyoung también, el Jungwoo también, el Taeil también.
Y lo poco que el Sicheng ha cantado —ya que es demasiado tímido— también le ha salido lindo.
Tiene una voz re grave, siono?
Pero con el tiempo se volvió distinto todo, ¿será que le está gustando la Jennie? ¿o solo está exagerando? ¿seguirá siendo así con el tiempo?
Volviendo a lo principal, Ten estaba en la cama de su bestie, esperándolo para dormir.
Ya eran las once de las noche, luego de un día muy entretenido, tomaron once y decidieron ir a acostarse.
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Liceanos por obligación // NCT chilensis.
FanficNo se te vaya a ocurrir faltar a clases un día, porque te puedes perder de mucho. Dos weones se agarran a combos, hacen guerra de galletones, alguien hace la cimarra, suspenden al mateo del curso, el más flojo se saca un 7, algún aweonao se saca la...