El legado Black ⁷¹

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—Quiero seguir durmiendooo no hará daño que falte a una clase de herbolaria.

—Ya has faltado la semana pasada y no quiero ir sola, vamos.

Tiré a Arabella fuera de la cama pero ella no hacía ni el mínimo esfuerzo para salir de ahí. Ya cansada de hacer fuerza y con ganas de desayunar porque era Martes de chocolate caliente y muffins, saco mi varita y un rayo eléctrico choca con su pierna. Ella grita y se levanta de golpe.

—¡Auch! ¿Por que hiciste eso?

—¡Para que te levantes de una vez!

Ella se viste con muy pocas ganas mirándome muy enojada y bajamos juntas a la sala común. Pansy y Draco hablaban con los delegados de la casa, seguro les estaban dando instrucciones para algo de prefectos que debían hacer hoy.

—Para ser sincera me alegro no ser prefecta. Son muchas responsabilidades y reuniones aburridas —la morocha al lado mío caminó con sus manos en su jean grande negro. Tenía su camisa blanca fuera de él y su corbata mal puesta. Su aspecto desaliñado le quedaba muy bien, le daba un aire a rebelde.

—Dudo que te eligieran como prefecta algún día. Es como entregarle una navaja a un mono.

Arabella me da un golpecito en el brazo y yo me río.

Llegamos al comedor y nos sentamos con Harry, Hermione y Ron. Miraban juntos el diario "El Profeta" y hablaban entre ellos. Sus expresiones no mostraban nada bueno.

—¿Que pasó ahora? ¿Alguna historia más de que con Harry somos unos chiflados? —intento restarle importancia al tema pero Hermione me mira con los ojos llorosos y apoya el diario en la mesa para que todos podamos ver.

DIEZ MORTIFAGOS ESCAPARON DE AZKABAN.

—Mierda.

Nos tomamos nuestro tiempo con Arabella para leer la noticia y quedamos con la misma expresión de terror que nuestros amigos.

—Bellatrix Lestrange... —repitió Arabella.

—Es la tía de Draco, ¿verdad? Es también una Black, ¿Verdad? —dijo con la voz entrecortada Ron.

—De soltera Black, sí. Se casó muy joven, ¿sabían? Es la mayor de las tres hermanas Black —Arabella miraba seria la foto de Bellatrix, se parecían bastante.

Ambas de piel morena, pelo rizado, ojos negros y tenían la típica mirada fría de los Black. Algunos podrían decir que era su hija si no hubiera prometido ser leal a su esposo con un apellido tan importante, o hasta más, que el de ella.

Bellatrix había torturado a los padres de Neville. Nos lo había contado su abuela un día que los encontramos de casualidad en San Mungo aunque con Harry lo sabíamos por medio de Dumbledore. A Neville no le caía muy bien Arabella por su gran parecido con la persona que dejó en un estado deplorable a sus padres, a veces lo intentaba disimular pero le era imposible, Neville no sabía mentir.

Arabella también luchaba con los prejuicios de ese apellido. Su padre había sido un mortifago, arrepentido pero aún así lo fue, y los que venían de grandes magos lo sabían. Su tío era un criminal para el resto de la gente aunque fuera inocente. Y Bellatrix era fiel sirviente de Voldemort.

Las cosas no habían sido fáciles para ella cuando recién llegó. Miles de rumores comenzaron a correr por los pasillos y todos la miraban un poco aterrados porque como el típico linaje Black, también había ido a Slytherin. Ella siempre nos decía que le daba igual lo que los demás dijeran de ella o murmuraban cuando pasaba caminando conmigo, hacía bromas y asustaba a los chicos de los años inferiores, también nos decía que disfrutaba de la atención y que practicaba para cuando sea famosa y vaya a dar un concierto.

❝𝐋𝐀 𝐎𝐓𝐑𝐀 𝐏𝐎𝐓𝐓𝐄𝐑❞  ᵃ ᵍᵉᵒʳᵍᵉ ʷᵉᵃˢˡᵉʸ ᶠᵃⁿᶠⁱᶜ ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora