Epílogo 9

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Los rayos del sol se asomaban por la ventana, y la brisa fría de la mañana traspasaba por ella, haciendo acurrucarse entre las cobijas a un omega azabache.

El menor fue despertado por el repentino frío que comenzó a sentir, abriendo sus ojitos ámbar.

Se levanto un poco, quedando sentado en la cama, soltando un pequeño bostezo mientras tallaba sus ojos, su mirada curiosa miro hacia un lado, observando el otra de la cama vacío.

No era de sorprenderse, el mayor casi siempre suele levantarse primero, ya se había acostumbrado a esto, pero le encantaría que el alfa se quedara con el aun que sea solo por una mañana.

Salio de su pensar al sentir como su retoño lo pateaba, sintiendo algo de dolor en el momento — ¿Ya estas despierto? — menciono para el cachorro, acariciando su vientre intentando calmar al pequeño inquieto.

— Tsukasa ¿ya estas despierto? — interrumpió Amane entrando a la habitación mientras secaba su cabello con una toalla — ¡Amane! — llamo un feliz y despeinado Tsukasa, estirando sus brazos dando a entender que el mayor lo abrazara.

Amane sonrió al ver la escena y  gustoso fue hacia el menor para envolverlo en sus brazos — Deberías alistarte, después se hará tarde —

— Hmm...pero todavía es temprano — dijo de una forma relajada, mientras se acercaba al cuello de Amane, era ahí donde se concentraba mas el olor a canela que tanto le gustaba del alfa.

— Pero...es la 1:00 de la tarde —

— ¿¡Que!? ¡Amane! ¿porque no me despertaste? — se separo del mayor y se levanto con cuidado, dirigiéndose al closet para buscar ropa.

— Es que te veías muy cómodo, dije que te despertaría en unos minutos pero termine haciendo otras cosas — dijo recostandose cómodamente en la cama, el omega solo volteo y lo miro de manera fea, saliendo del cuarto por ultimo.

— Es que te veías muy cómodo, dije que te despertaría en unos minutos pero termine haciendo otras cosas — dijo recostandose cómodamente en la cama, el omega solo volteo y lo miro de manera fea, saliendo del cuarto por ultimo

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— Oye Amane —

— ¿Que pasa? Tsukasa — el mayor se encontraba secando los cabellos húmedos del menor con una secadora de cabello — ¿Cuantos cachorros te gustaría que fueran? —

— Bueno...yo pienso que uno estaría bien, pero si son mas de uno no tendría problema — Amane trataba de convencerse a si mismo de que seria un solo cachorro, había apostado dinero y tenia que recuperarlo.

Pero una gran parte de el decía que no solo seria un pequeño, los embarazos dobles en su familia son muy comunes, eso subía la posibilidad, y eso significaba dinero perdido, debió de pensarlo dos veces antes de poner su dinero en juego.

Sin duda Mitsuba o Kou disfrutarían ese dinero.

— ¿Que tal cuatrillizos? — dijo con una risita, Amane igual río por dicho, solo que fue con un toque nervioso, cuidar y criar a unos mini Tsukasa seria difícil.

¿Podrías Llegar A Amarme? [Amane X Tsukasa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora