Piacere (+18) © [Completa]

CAPITULO 32

Leonardo Marchetti

Vine a esta fiesta, sin entender el porque. Solo recibí un mensaje de Astrid, y decidí venir. De todos modos, a Cassandra parece no importarle, ya que lo único que ha hecho es llevarme a la primer habitación que encontró. Cada vez que pienso que esta bien, se tambalea y cae al suelo.

Puedo ver la parte de arriba del bikini, es jodidamente sexi, y color rojo con su piel pálida le deja tan perfecta. Es una combinación que nadie mas podría tener.

—No sabia que ibas a venir—dice por tercera vez en la noche.

Suspiro— Yo tampoco, solo vine.

—¿Qué pasa, Leo? —que me diga así me produce algo —Estas tenso…raro…tienes un perfume muy conocido. Hasta se me hace que es de….

Se calla y cierro los ojos. Si, antes de venir estuve con Dafne, no sabia que su perfume era tan fuerte que podía quedar en mi piel. Observo el rostro de Cassandra, solo hace una mueca.

Esta muy borracha para pensar.

Y no se, si eso es bueno, o malo.

—Estoy bien, Cassandra—suspiro

—¿Por qué me dices Cassandra? Creí que te gustaba Cass.

—No somos nada, no puedo llamarte así—vuelvo a suspirar.

—Somos….somos amigos con derechos—la siento sonreír y niego interiormente.

No debía haber venido.

No con ella así.

—No somos nada—vuelvo a repetir y esta vez asiente y se calla. Aunque podría aprovechar para sacar algo de información —¿Por qué mencionaste lo de Miley la otra noche?

Se tensa, pero le acaricio el brazo con los dedos y se calma.

—¿Por qué mencionaste lo de Miley? —vuelvo a preguntar.

—Se la historia de Miley—que ese nombre salga de sus labios no me gusta—También la de Madeleine. Yo…yo no quiero terminar como ella ¿Sabes?

No me sorprende. Parte de mi sabía que si ella seguía teniendo comunicación con Hansel, el iba a abrir la boca.

—Tampoco vas a terminar como ella— suspiro.

—¿Cómo puedo estar segura de eso?—Vale, que esté borracha me ayuda a que sea completamente sincera— lo único que haces es…aparecer para sexo, mostrarte frio, cariñoso, yo…yo no quiero eso.

—Cassandra—me mira— hoy se termina el trato.

—¿Qué? —no se lo había comentando. O simplemente se le olvido.

—Ya pasaron los cuatro meses, terminaste la universidad, puedes comenzar a trabajar en la empresa—digo firme, observo su rostro, pero no veo ninguna reacción. Es como si el alcohol haya opacado todo— El trato se da por terminado.

—¿No nos volveremos a ver? —pregunta y suspiro.

—¿Quieres seguir con el trato?

—Quiero que me sigas follando, Leo—por fin sus ojos mieles conectan con mis azules— quiero seguir sintiéndote, dandote placer— sonríe—dándote piacere.

Sonrío inconscientemente. La miro, aún por su piel recorren gotas de agua, su cabello esta húmedo y moja toda la camisa playera que trae puesta. Se ve jodidamente bien, se ve como una completa diosa.

Entiendo porque los hombres al verla babean, es hermosa, tiene esa bella natural.

Cuerpo de diosa, carácter de reina, y pensamientos de princesa.