The flight of butterflies [KTH-JJK]

Capítulo 22: Cintas

"Los fantasmas del pasado siempre estarán ahí"

—¡Fue mi culpa! —Jungkook se removía dando bruscos golpes al aire, los ojos apretados con tanta fuerza que incluso sus parpados temblaban —, todo fue mi culpa —gritó de nuevo, sin poder despertar.

—Jeon —lo llamó Taehyung con suavidad —. Jungkook —susurró con voz dulce.

Nada.

—Es un sueño, despierta —las manos del castaño sujetaron el rostro del pálido dando una ligera caricia, pero el azabache no detenía sus jadeos. Taehyung sintió una calidez extraña al costado de su dedo, una lágrima pequeña empezaba a caer cerca de su mano—. Despierta, por favor —intentó él por segunda vez. Su mirada se volvió triste y sus cejas se curvaron hacia abajo.

Solo lloriqueos.

Pequeños gemidos lograban salir de la boca de Jungkook, quien no dejaba de negar con la cabeza mientras lloraba al retorcerse de hombros, como si quisiera apartar su cuerpo de las manos de alguien, o más bien de sus memorias, pero el pelinegro no sabía que el cuerpo no puede alejarse de los recuerdos.

—Jungkook —dijo Taehyung en un último susurró sin saber qué hacer ante el llanto que poco a poco empezaba a rasgar su corazón —, es una pesadilla, solo es una pesadilla —masculló dando una palmadita suave en el rostro del pálido.

Sus labios estaban entreabiertos y sus manos sujetando las mejillas del pelinegro.

—Despierta —suplicó, entonces su cuerpo fue cayendo hacia adelante y sus labios cerezas rozaron la frente del pálido —, despierta es solo una pesadilla, cuando cuente hasta "tres" despierta —susurró con los labios pegados a la frente del azabache —. Taehyung, está contigo —. Taehyung está aquí —balbuceó apartando un mechón de cabello.

Inhaló aire y sin soltar a Jungkook empezó a contar con voz rota.

—Uno —dijo con pesadez —, dos —su garganta ardía y antes de dejar salir el último número sin darse cuenta también había empezado a llorar —. Tres —soltó con un suspiró profundo.

Nada. Los parpados de Jungkook solo se movían por la fuerza de mantenerlos cerrados.

—Despierta —los labios de Taehyung temblaron y con lentitud fue acercando su boca nuevamente hacia la frente del pelinegro. Con nerviosismo fue pegándose hasta que sus labios se estamparon con la piel suave y pálida de Jungkook.

Un beso en la frente.

No tenía nada más que ofrecer.

Entonces los parpados de Jungkook temblaron otra vez y sus pequeñas y oscuras pestañas fueron apartándose de sus ojeras, dentro de sus sueños la calidez de Taehyung lo había encontrado. No fue una pesadilla lo que lo había visitado en el interior de su mente, fue más bien un recuerdo, y de nuevo Taehyung lo había salvado de los fantasmas del pasado.