gRANDE TWITTER GRANDE. #1

70

JungKook llegó a su casa y cerró la puerta en la cara de unas cuatro personas que habían conseguido seguirlo hasta ahí.

Comenzaron a tocar sin parar, parecían no saber lo que era respeto o privacidad, pero Jeon simplemente las intentó ignorar en lo que buscaba a su madre.

No tardó demasiado, pues en la nevera encontró una nota.

"Me fui al hospital pq alguien fue estúpido y se murió, así que cocina algo y me guardas. No seas pendejo y no quemes mí cocina.
Con odio, mamá."

Sí, era su madre.

Limpió algunas lágrimas que se le habían escapado en el trayecto de la cafetería hasta su hogar y sorbió su nariz. No sabía si esperar a que se fueran o si tendría que vivir así el resto de su vida.

Se cuestionó el llamar a TaeHyung. Tomó su celular, notó la notificación de que el idol estaba en live desde hace media hora, e importándole poco igual marcó su número.

Total, sus fans ya sabían que tenía vida personal.

Tardó tres pitidos en contestar.

—Hey, ¿pasa algo?

En vez de decir palabra alguna, Kook rompió en llanto. Esas personas siguiéndolo hasta cansarse, gritándole insultos, pidiendo información sobre TaeHyung, exigiendo que se detuviera. Ni siquiera quería imaginar qué habría pasado si realmente se hubiera detenido.

Simplemente lo superaba.

—Debo irme, tengo otros asuntos que atender. —escuchó. —Estaré en V-live pronto, nos vemos.

Luego de un par de golpecitos que llegó a oír, volvió a escuchar la voz de su novio.

—JungKookie, cálmate, ¿si? ¿Qué pasó?

Su respiración se volvió acelerada, no podía respirar, su cuerpo temblaba y al no poder hacer nada por detener los golpes que caían a su puerta, se sentó en el frío suelo de la cocina y escondió su cabeza entre sus piernas.

—Mi niño, respira hondo, suelta el aire por la boca. Respira conmigo, vamos. —dijo, antes de comenzar a respirar como un ejemplo que JungKook hizo el esfuerzo por seguir.

Una vez estuvo más tranquilo TaeHyung volvió a cuestionar.

—¿Estás bien? ¿Necesitas que vaya por ti?

—¡No! —soltó, claro que no iba a dejar que fuera a su casa que probablemente estaría rodeada en menos de media hora. —N-no vengas, solo...

—Bebé, no comprendo, ¿qué ocurre? Si no me dices no sé cómo ayudarte.

Jeon suspiró, volviendo a levantarse para poder ir a acostarse a algún sillón de la sala.

Notó que los golpes en la puerta habían cesado, tal vez solo estaban esperando a que saliera o ya se habían ido.

—T-tus fans... —comenzó. —Ya saben quién soy. Me r-reconocieron en la calle y me siguieron hasta mí casa. N-no paraban de gritar cosas, estaba tan aterrado...

TaeHyung maldijo entre dientes y sin responder, salió de su estudio para ir a la oficina de su jefe, quien al ver a un Kim enojado entrando, no dudó en dejar lo que hacía para saber qué sucedía esa vez.

—Quiero que mí chófer y unos malditos guardaespaldas vayan ahora mismo a recoger a JungKook y lo traigan aquí.

—¿Qué pasó?

—Eso mismo quisiera saber, jefe.

El pelinegro ya no entendía nada.

...

ya pueden ir a mimir, algunos tienen clases mañana así que no voy a actualizar para que no se desvelen, a mimir dije.

- Sofia ReFus.