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Se sentía dolido. Engañado. Como si hubiera salido de la más cruel pelea que haya tenido en toda su vida, pero sobretodo se sentía enojado. La rabia corría entre sus venas y esta era mezclada con una pizca de tristeza. ¿A quien quería engañar? Es obvio que se sentía como la completa mierda después de oír esa frase siendo pronunciada por los labios de la muchacha.

«Yo soy Wheein, la novia de Taehyung.» las palabras se volvieron a repetir en su cabeza.

Siendo honesto... quería llorar, gritar, tirar todo lo que encontrase a su paso y reparar el dolor que tanto estaban causando en su pecho. Su corazón fue aplastado por un martillo de cristal y carbonizado con el más potente lanzallamas. Si así es como se sentía el amor, si así se sentía como te rompían el corazón en mil pedazos... esto Jeon Jungkook no quería vivirlo más en su vida.

Todo iba de maravilla, ¿porqué tuvo que cambiar? ¿Porqué Taehyung estuvo ocultándole una cosa así? ¿Estuvo engañándolo por mucho tiempo o el era el segundo plato? Lo que sí sabía el muchacho era que no iba a seguir viviendo en una mentira por mucho que amara a Taehyung.

Sabía que le pisaba los talones por pocos centímetros, aún así no fue excusa para entrar a los camerinos y cerrar la puerta tan fuerte que seguramente se escuchó por todo el estudio. Su corazón yendo a mil por hora como si estuviera escapando de alguien, pues así era. Tras suya se encontraba un castaño pronunciando sus nombre para llamar su atención, cosa que no lo paró en absoluto.

Pasaron unos pocos segundos cuando la puerta se abrió y fue cerrada nuevamente. Jungkook estaba apoyado en el tocador frente al espejo y con sus ojos cerrados fuertemente.

—Fuera.— ordenó.

—Jungkook... lo s-

El nombrado se giró bruscamente.

—Jungkook, ¿que? ¡Dime! ¡Jungkook, ¿que?!— el azabache se aproximó al mayor.— ¿me dirás que tienes una explicación? ¿Que ella es una buena bromista? ¿Que? ¡Dime, Taehyung! ¡Porque no lo entiendo!— el chico iba hablar pero nuevamente el menor lo cortó— Mierda...— dijo cuando notó sus ojos llorosos.— mira, si solo querías cortar conmigo o jugar al "hetero confundido" podrías habérmelo dicho y no me hubiera importado acostarme contigo, pero no te da derecho que me trates de esta manera y me hagas sentir como la mierda.

—No llores...

—¿Qué no llore? ¡Eres un idiota!— lo empujó haciendo que diera unos pasos hacia atrás. Jungkook tapó sus ojos con su brazo.— ¿Es que hice algo mal para merecer esto?— se destapó, ya no importaba que lo viera llorando. No podía ocultar su dolor.— Primero tú odio, luego haces que termine mi relación con Yugyeom, ¿y ahora me entero de que tienes novia? ¿¡Qué coño te pasa conmigo, Taehyung?! Si es que de verdad me quieres, dime una razón del porqué me tratas así.

El castaño no sabía cómo explicarle su situación de vida ahora mismo. No sabía si Jungkook lo entendería, no sabía si le ayudaría a encontrar aquella solución que no la había, pero lo que sí sabía es que no quería perder a Jungkook y aún así no podría decirle.

—Lo suponía...— susurró el menor.— Se acabó Taehyung. No me llames para nada y el único contacto que debes mantener conmigo es el profesional. Vete con tus cuentos homosexuales a otra parte.

Dicho aquello, el azabache tomó sus cosas de aquella mesa y salió de los camerinos chocando hombros con Taehyung. El castaño quedó allí dentro con su corazón palpitando a mil por hora, este de repente dolió y aquello le hizo quedarse quieto.

Confundido.
Mirando a un punto fijo el mayor comprendió que todo había acabado, pero a parte de confundido también estaba algo dolido. Todo era su culpa y aquello no podía negarlo, solo que las palabras de Jungkook lo dañaron bastante porque se burló de aquella confusión que tenía aún dentro de él. Ahora todo era en vano.

Y allí se quedó Kim Taehyung, solo y pensando en que a partir de ahora Jeon Jungkook lo odiaba con toda su alma y ser. Solo el silencio era consciente de aquella lagrima que se resbalaba por la mejilla del castaño.

"𝐁𝐄𝐇𝐈𝐍𝐃 𝐓𝐇𝐄 𝐒𝐂𝐄𝐍𝐄𝐒" [ᵀᴬᴱᴷᴼᴼᴷ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora