Minatozaki Sana es puramente orgullosa, egoísta, solo piensa en sí misma y en el provecho que puede sacar de todo. En salir de fiesta siempre que pueda y pasarlo bien todos los fines de semana, como cualquier adolescente a su edad.
Sana termina ebri...
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Las nueve estaban reunidas en la mesa desayunando, tras esto deberían de ir al parque de atracciones así que estaban hablando de a que atracciones subir o cuales eran las mejores.
De vez en cuando hablaban con las mesas de al lado, como la de Irene o la de Soyeon y Jackson.
—Entonces...trece —contó Tzuyu.
—Agarramela que me crece —respondió Chaeyoung.
—Idiota —le pegó de vuelta Chou escuchando a su amiga quejarse.
Sana y Jeongyeon estallaron en risas y las demás la miraron mal.
—Estáis tontas que son las putas nueve de la mañana —bostezó Nayeon.
—Venga Nayeon, bébete el café y tira —golpeó su espalda Minatozaki.
—Es que ni desayunar se puede —rodó los ojos Jihyo.
—Sana, que pesada hija deja a Nayeon —la miró Myoui dándole una patada por debajo de la mesa.
La mencionada miró divertida a la rubia, por fin había conseguido que Mina hablara para molestarla.
—Dejadla, está hiperactiva a las mañanas —trató de defender a su mejor amiga Hirai.
—Pero Jeong y Chaeng también le siguen el juego —suspiró Dahyun —pesadas.
—Perdón pero yo solo me rio de lo que dicen —encogió los hombros Yoo.
Myoui negó con la cabeza y trató de seguir ayudando a Tzuyu a buscar atracciones interesantes, pero una vez más Sana la sacó de quicio al sentir una patada bajo la mesa.
—¡Gilipollas! —le gritó Myoui —Te la vas a llevar Sana.
—Mina la chupa gratis —respondió Minatozaki.
—Sana va a pillar el SIDA.
—Mina fea.
—Sana tu cara literalmente se parece al puto shiba inu, cállate.
—¡Y tú un puto pingüino otaku!
Los insultos iban de aquí para allá como un partido de tennis.
—¡Ya hombre! —golpeó la mesa Jihyo haciendo que las dos se callaran.—Paz y amor, así no se tratan las amigas.
—Habló el mudo y dijo lo que pudo —murmuró Jeong.
—Que ladras tú cabeza coco —frunció el ceño Park en dirección de su amiga.
—¿Perdón? Thomas el tren —devolvió el ataque Jeongyeon.