Sana's harem | +18

22.Triste atardecer

os recomiendo escuchar la canción durante la última parte del capítulo o durante todo el cap. 😼

💔

Le pareció raro sentir tanto espacio libre en su cama, y aún más sabiendo que su cama no era tan grande. Tenía más calor de lo normal y su madre no la había levantado pronto para acompañarla a la iglesia.

Se removió abriendo lentamente los ojos y viendo a su novia a su lado. Había dormido apegada a su lado toda la noche, sus piernas estaban enredadas y tenían una posición rara.

Dahyun cuidadosamente se movió mirando el rostro tranquilo y adorable de la japonesa durmiendo.

Hacia mucho que no veía en Sana una expresión tan pacifica y genuinamente feliz. Parecía soñar con algo bueno.

Inevitablemente llevó una de sus pequeñas manos hacia el rostro de Minatozaki remarcando con su yema las facciones de esta.

—Huele tan bien —suspiró Sana adormilada  enterrando su cara en el pecho de Kim.

—Perdón, ¿te desperté? —preguntó preocupada.

—Más o menos. Da igual, tengo hambre —hablaba aún ocultando su rostro en esta.

Dahyun sonrió enternecida y peinó un poco el cabello de su novia dándole ciertas caricias en la nuca.

—Se te acelera el corazón —sonreía Sana escuchándolo.—¿Estás nerviosa?

—No, estoy cómoda. Eso pasa porque me gustas.

—Ósea que te gusto mucho porque late muy rápido —rió recibiendo una tímida mirada por parte de Dahyun.—Un buen método para saber si le gusto a alguien.

—Le gustas a muchas.

—Lo sé y es inevitable ¿me has visto?

Ambas rieron y estaban a punto de besarse cuando la puerta se abrió.

—Sana a desayunaaar —gritaba Chaewon, su hermana pequeña y luego vio la escena —¡Ay perdón!

La niña se sonrojó y salió corriendo dejando a la pareja a solas, para eso Dahyun se había separada de Sana y se tapaba con su cabello el rostro.

Muerta de vergüenza tragó saliva pensando en cómo le daría la cara a los hermanos pequeños y peor aún a la señora Minatozaki.

—Bueno, tampoco estamos desnudas —trató de mejorar la situación la japonesa.

—¡Sana baja ahora mismo! —se escuchó el grito de su madre.

Seguramente enfadada, a saber lo que le habría dicho Chaewon.

—Bajemos, no te dirá nada malo, mi madre te conoce de toda la vida Dubu...

"Dónde me he metido" lloriqueaba por dentro la menor caminando tras su novia, esa era de las últimas maneras en las que quería presentarte formalmente ante su suegra.

—A quién has metido en la casa ¿te estás revolcando con alguien estando tus hermanos? —le espetaba amenazándola con la escoba mientras sus hermanos pequeños observaban el show. —¡Qué cara tienes señorita!

—Mamá...por favor deja explicarme...

—¡Vergüenza debería de darte y...! —su madre no finalizó la frase al ver a la chica de tez pálida tras su hija.

Ocultó rápidamente la escoba tras su espalda y le dio una cálida sonrisa.

—Dahyun hija, ¡eras tú! Pasa, pasa ¿qué quieres desayunar?