Capitulo 26

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Estaba pensando mi respuesta cuando senti la mano de Toni acariciar mi pierna.

-no me duele que tengas novia.-me las arregle para decir- me sentí lastimada por ella, por la forma en la que la engañas.

Su mano subió por mi pierna hasta llegar a la tela de mi tanga. Empezó a acariciarme lentamente por encima.

-deberias irte.

-ah si?.- me miró a los ojos.

Que mierda, se veía tan sensual. No importa la situación, siempre lo era.

-si- fingi no tener interés.

-¿no te gusta lo que estoy haciendo?- seguía tocando de arriba a abajo por encima de la tela.

-hmmm.- sin tener conciencia de mis actos, mordí mi labio inferior.

Toni sonrió.

-te gusta- afirmó, movió mi tanga para un costado haciendo que me toque directamente.

-pa...para.-

Su dedo empezó a masajear mi clítoris lentamente, mientras repartia besos en mi cuello. Cerré los ojos y moví mi cabeza para atrás, golpeando la pared. Uno de sus dedos bajo un poco y fue introduciendose lentamente en mi. Mordí mis labios para no gemir.

-no puedo controlar la excitación que me haces sentir.- volvió a pasar su lengua por mi cuello.

Empezó a mover el dedo rápidamente, lo que hacía que me arqueara de placer. Se sentía tan bien.

-estas tan mojada.- mordió el lobulo de mi oreja- se siente tan bien.

-Toni...- cerré los ojos.

Sus dedos me hicieron llegar al orgasmo. Sentía el calor acumulado en mi cuerpo y una presión en mi zona íntima. Saco sus dedos y se los llevo a la boca.

-sabe usted exquisita, señorita Blossom.- susurro.

Mis mejillas se pusieron rojas.

Se inclinó y presionó sus labios contra los míos. Me agarró de la nuca e hizo presión para profundizar el beso. Su lengua jugaba dentro de la mía. Sus manos rodearon mi cuerpo y me presionó contra ella.
Empezó a frotarse contra mi de arriba a bajo en movimientos lentos. Estaba quedando sin aliento.

-Toni.- detuve el beso y solté un suspiro.

-mierda.- dijo y se alejo un poco.

La mire confundida. Se bajó el cierre y bajo sus pantalones. También bajo su tanga y me miró.

-me debes algo, nenita.- susurro provocándome.

Trague saliva y asenti. Me sentía como una sumisa. Podría obedecer cualquiera de sus órdenes sin importar lo que fuera. Haría lo que me pidiera. Era raro, pero esa sensación le ganaba a mi cuerpo.

Me acerque a ella y me arrodille. Tire mi pelo para atrás y la mire a los ojos, mostraban deseo y lujuria.

Mire su centro, estaba completamente mojado. Levanté mi mano y empecé a masajearle el clítoris. Ella largo el primer suspiro. Acerque mis labios y les deje un par de besos ahí.
Alcé la vista y ella me estaba mirando, se relamio los labios y llevo su mano a mi cabeza para acariciarme el pelo. Pase mi lengua por su centro y succione.

-por dios.- largo.

Abrí la boca y deslice mis labios por todo su centro. Empecé a succionar y pasar mi lengua lentamente. Ella cerró los ojos y movió la cabeza para atrás. Seguí cada vez más rápido.

-quedate quieta.- dijo.

La mire estática sin quitar mi boca de su sexo y espere a que su respiración se tranquilizara.

-quiero terminar en tu boca. Quédate quieta.- su voz era tan excitante.

Comenzo a moverse sobre mi rápidamente. Yo solamente la miraba, no puedo describir la expresión que tenía en su cara. Era glorioso. Se veía demasiado sensual.

-voy... voy a terminar Cheryl.- aviso con los ojos cerrados y la voz entrecortada.

Me acerque a ella y sin aviso, empecé a besarla frenéticamente. Ella correspondió enseguida a mi beso.

-mmm, sos la mejor.- dijo entre beso y beso.

Mis mejillas se pusieron rojas.

Su celular empezó a sonar, interrumpiendo  beso. Maldije por dentro. Se inclinó y busco adentro se su pantalón. Lo saco y atendió.

-hola.- apoyo el celular en su hombro y empezo a ponerse el pantalón- oka, ya te busco enseguida. Yo también te amo.- corto.

Todos mis animos se vinieron abajo.

-tengo que irme.- dijo sin dar importancia.






Mi profesora - ChoniDonde viven las historias. Descúbrelo ahora