Duele amar [TERMINADA]

🥀Mundo caído🥀

- Estás bien?

- Si... Eso creo. Es solo que...

No podía decírselo. Por mucho que intentara, parecía como si las palabras se me enredaran en la lengua.

- Lo que dijo te tiene asi, no?

Suspiré.- Si, Nik.

- Tranquila. No dejaremos que nadie te haga daño, ni a tu hijo.

Dirigió su mano a mi barriga y la acarició. Mi piel se erizo ante su toque y, sin poder evitarlo, puse mi mano encima de la suya.

- Por que dijiste eso?

- Que cosa? De que hablas?

- Que eras mi novia.

"Uy, T/n, te fregó. Como le dirás que le dijiste eso porque en el fondo es lo que querés ser?"

Sacudí mi cabeza. Estúpida conciencia.

- No... Es solo que vi que era la única manera de que no me lastimaran... Pero no funcionó.

Vi como una chispa de... Decepción? Se reflejó en sus ojos.

- Por que preguntas?

- No nada. Sólo quería saber.

Noté como la decepción y la tristeza se notaba en su voz.

- Está bien.

En ese momento, sonó mi teléfono y era un número desconocido.

- Si?

- Hola.

Oir su voz fue como un balde de agua fría. Me aleje de todo, cambie de número... Hice mucho para que no se metiera en mis "vacaciones".

- Que quieres?

- Cuando regresas?

- Por ti? Nunca.

- Crees que no puedo ir yo?

Maldición. No había pensado en eso. El puede venir...

- No te atrevas, Elijah.

- No puedes...

Antes de que terminara de hablar, le colgué. No podía soportar el sonido de su voz.

- Todo bien, amor?

- Si, Nik.

- Tranquila. No dejaremos que el se acerque a ti.

Acarició mi cara y yo sentí creciendo en mi las ganas de besarlo... No, no. Esto no está bien.

- Siento interrumpir... Pero debemos irnos, Nik. Teníamos un trato con esa bruja.

Nik suspiro y se levantó. Kol salió y Niklaus salió detrás de él.

- Supongo que esto me deja a mi sola...

Rebekah había salido a quien sabe donde... Niklaus y Kol a "arreglar sus asuntos pendientes", por lo que estaba sola, aburrida y embarazada. 

"No creo que sea malo que salgamos un rato, pequeña T/n. Además no hay nadie y ellos deben entender que esto es aburrido."

Mi cabeza se dividió en dos: Una parte quería salir de la casa y la otra se quería quedar en casa, por precaución. Hasta que la parte irracional ganó. 

Sali de la casa y me subí al auto de Niklaus, ni siquiera sabia hacia donde iría, pero solo seguí adelante sin rumbo. 

Luego de aproximadamente 10 minutos, en los cuales casi me choco contra 3 personas por quedarme dormida, llegue a un lugar muy oscuro y muy solitario. Algo en mi interior, me decía de que algo malo pasaría, pero solo seguí avanzando tratando de encontrar una salida.