Minseok estaba en la sala con Jisung, finalmente había logrado enviar a una actividad a los mellizos, Donghyuck empezó teatro en una escuelita de arte para niños y Jaemin decidió continuar con el karate, Ten estaba en su habitación esperando que sea la hora para ir a celebrar con Taeyong su audición y Johnny hoy tenía entrenamiento.
—¿por qué el abuelito está triste?—preguntó Jisung.
—su papá no le dejó bailar ballet cuando era chiquito—Minseok se comió unos bocados de chocolate y Jisung lo imito.
—Minseok ¿vas a ser viejo algún día también?—su hijo le miro curioso y Minseok tarareo.
—por supuesto, eventualmente envejeceré ¿por qué?
Jisung se quedo mirando la pantalla y los ojos se le llenaron de lagrimas—pero no quiero que seas viejo, Minseok—dijo con un tono de voz grueso, posiblemente aguantando las ganas de llorar que le dieron.
Minseok sonrió y lo abrazo—hey, pero ser viejo es genial, no trabajaré más, me quedaré en casa viendo mis series, pediré comida rica y te veré crecer, es genial.
el pequeño le devolvió el abrazo pero sus brazos todavía eran cortos y no lo podía rodear tan bien, sin embargo, fue dulce que Jisung se expresara, Minseok volvió a sonreír, manteniéndolo cerca de su corazón.
—eres mi todo, Jisung, no lo olvides.
—a los demás no los quieres porque son feos ¿cierto?—la carita de Jisung brilló de alegría y Minseok volvió a reír.
—sí—dijo, asintiendo, señalando su propio rostro—no tienen nada de lindos, ellos no sacaron mis rasgos como tú, estoy seguro de que eres el único que puede heredar mis virtudes.
Jisung rio contento y Minseok le acaricio la mejilla.
—es nuestro secreto ¿entendido? no vayas por ahí diciéndole a tus hermanos que les dije feos.
—ehhh. les diré.
—ehhh, sabía que no podía confiar en ti.
Jisung se quedó dormido al lado suyo, Minseok lo observó, acariciando sus cabellos negros y finos, era su pequeño demonio, era su último hijo, sabía que no volvería a tener más hijos, Jisung era el único que le quedaría cuando los demás crecieran un poco más.
Le entristeció pensar en que esta cercanía que tenían también sería algo difícil de superar cuando él sea viejo y no esté más, Jisung estará acostumbrado a tenerlo alrededor y cuando no lo tenga, sufrirá incluso mas que sus demás hermanos.
—¿por qué estás pensando en la muerte? No seas estúpido—Chanyeol le dijo, al otro lado de la línea.
Minseok dejó caer sus lágrimas, intentando no hacer ruido para no despertar a Jisung—¿qué voy a hacer si lo dejan solo? Es un bebé.
—nadie lo va a dejar solo, para eso estás tú, de todos modos, nunca dejaría solos a ninguno de tus hijos, lo sabes, sino soy yo, será Jongin, nosotros siempre cuidaremos de tus hijos—Chanyeol suspiró y Minseok se limpió las lágrimas—deja de estar tan sensible, y nuevamente recibí una carta de tus padres—su amigo suspiró por milésima vez—diles tu dirección de una vez.
—¿qué decía la carta?—cuando se mudó, decidió no darle la dirección a sus padres, debido a que queda más cerca de la granja de los Kim.
—tu padre dice que eres un mal hijo y que ojalá ardas en el infierno—murmuró Chanyeol—pero tu mamá dice que preparó dulce de naranja así que quiere que vayas a buscar y lleves a los niños, nacieron los pollitos y los conejos, quieren regalarle alguno a los niños.
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Lo que es ser un Kim
FanfictionLas familias Kim comienzan nuevas aventuras y retos en sus vidas, esto demostrará que ser un Kim es mucho más que llevar un mismo apellido.