Los estudiantes empezaron a salir de la clase.
Agarro mi mochila fuertemente con las dos manos, sin mirar al frente. Aun con la conversación de Lakaios rondando por mi mente.
La frustración y la impotencia que recorre mi cuerpo está a punto de hacerme perder el control.
Una frustración parecida a cada vez que seguía una pista, teniéndolo tan cerca y cuando llegaba a sótanos abandonados, edificios a punto de caerse o cuevas en lo más profundo del bosque, ya era demasiado tarde.
Él ya se había ido y el niño o niña que secuestró también.
No había pruebas y las pistas casi siempre llevaban a un camino sin salida.
Pero yo sabía que luego de mí, tras los avances que logró, no ha podido parar y claramente sigue experimentando con munis.
"Athea"
Y eso es lo que más me molesta, saber que él está libre, en algún lado y sigue torturando, sigue abriéndolos y controlándonos.
"Athea"
Y yo sabiendo lo que se siente, sabiendo lo que trae consigo no puedo quedarme aquí, no cuando sé que Lakaios puede tener una pista que lo haga llegar hasta él.
"Necesito ir a buscarlo"
—¡Athea!—el grito de Adonis me hace levantar la mirada.
Adonis ha aparecido delante de mí, su uniforme está desordenado al igual que su cabello.
Su mirada nerviosa y su respiración acelerada me indica que no soy la única inquieta por la situación.
Pero por alguna razón al ver alivio en sus ojos, al tenerme de vuelta, comprendo que su preocupación va más allá de que el haya aparecido de nuevo.
—Athea, hoy hay clase de fuerza y resistencia, tenemos que irnos.—las palabras de Adonis tardan un poco en tener sentido en mi mente. Cuando entiendo lo que sucede la burbuja donde estaba escondida explota y noto, finalmente, el alboroto en el pasillo.
Los estudiantes ruidosos y nerviosos que caminan en montones con sus uniformes de deporte.
Me quedo unos segundos analizando cual es el mejor camino que puedo tomar para llegar a mi habitación y poder subir al techo.
La ruta se crea en mi mente rápidamente y retrocedo un poco para comenzar a caminar pero mi espalda choca con algo duro.
Sobresaltada, con todos mis sentidos a flor de pies me volteo dándome cuenta de que choco con nada más y nada menos que con los brazos cruzados del profesor Areleous, el responsable de dar la clase de fuerza y resistencia.
"Joder" Adonis maldice y luego desaparece haciendo una mueca, con los ojos me dice que tengo que encontrar la manera de escapar.
Me volteo a ver al profesor directamente y le sonrío abiertamente.
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MUNIS
FantasyHubo una explosión. Solo eso. Una explosión que calló a todo el mundo. Las risas, los parloteos...Todo quedó en un profundo silencio. Nadie se imaginó que los problemas comenzarían, que la tranquilidad de sus vidas sería eliminada tras esa explosió...