19. Aléjate de nosotros

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Los meses pasaron y la pareja había realizado un recorrido por muchas partes del país con el propósito de ver junto nuevos paisajes, nuevos colores. Mew parecía un niño pequeño y Gulf se dejaba llevar por ese espíritu infantil para disfrutar de todo. Llamaban a sus amigos de vez en cuando y a madre todos los días para contarle cada aventura que tenían. Estaban muy felices. Pero en la ciudad las cosas se habían empezado a complicar. No sabían nada hasta que pisaron el aeropuerto de regreso.

La cara de Mew estaba en los telediarios y la cosa no pintaba bien. Kao llamó para informarles que iría a recogerlos al aeropuerto para explicarles. Mientras Gulf y Mew esperaban por Kao, notaron que muchas personas miraban a Mew, lo señalaban y murmuraban. Poco a poco se aglomeraban frente a él. Gulf miraba para todos lados. No entendía muy bien qué pasaba. Los dos estaban tomados de la mano, se apretaban con fuerza, empezando a ponerse nerviosos. Las personas empezaron a tomar fotografías y Mew se tensó, quería gritar a esa gente hasta que apareció Kao llamándoles con la mano para que se acercarán al auto.

- ¿Qué carajos está pasando? – preguntó Mew subiéndose al asiento del copiloto.

- Es Lhong – respondió Kao intentando conducir para salir del aeropuerto que se estaba llenando de periodistas. Mew se tensó y miró hacia atrás donde se encontraba Gulf mirando el móvil que le había extendido Kao.

- ¿Qué pasa con él? – preguntó Mew.

- Estás en una relación con él – dijo Gulf serio mirando todavía su teléfono. Mew volteó a verlo sin comprender.

- Estoy en una relación seria, muy seria contigo Gulf, tú lo sabes- dijo, pero Gulf no levantó la cabeza, seguía con los ojos clavados en el móvil.

- Le cobramos a Lhong la deuda por medio de los bienes inmuebles que aparecen a su nombre y su estrategia para no perderlos ha sido mostrarte como su pareja. La pareja que quiere acabar con su carrera- dijo Kao apretando el volante- ha difundido imágenes de su relación, como besos, salidas juntos, viajes, entre otras cosas. Esto salió ayer, por eso no les habíamos contado nada. Es probable que haya periodistas en su casa, creo que lo mejor es que vayamos a la mía.

- Y ¿cuál es el mejor paso para seguir? – preguntó Mew.

- No lo sé Mew- respondió- todo es muy complejo, estoy muy enojado con ese imbécil que se ha atrevido a jugar sucio, de esta manera, poniéndote en el ojo de huracán. Esto no solo te deja a ti muy mal parado, también a nuestra empresa que está a tu nombre, afecta nuestras posibles alianzas, lo jode todo- terminó de decir Kao. Reinó el silencio en el auto, Gulf había dejado de ver el móvil y ahora miraba por la ventana. Estaba odiando con todo su corazón a ese sujeto. No quería dejarse llevar por eso, pero no podía evitarlo. También estaba cuestionándose las razones que lo llevaron a cobrar el dinero de esa manera, debió ser más cauteloso y pensar en las posibles respuestas del tipo. Se había confiado y ahora estaban en esa situación tan compleja. Estuvo mirando las redes y se había dado cuenta que Mew estaba siendo definido no solo como la pareja más malvada por querer arruinar la carrera de su pareja, sino también de infiel y otras cosas.

- Creo que lo mejor es que me dejes en un hotel- dijo de pronto Gulf, haciendo se Kao frenara de golpe.

- ¡No! – respondieron los amigos a la vez. Se escucharon bocinas de otros autos, lo que hizo que Kao avanzara un poco más para orillarse debidamente.

- Por favor, las cosas serán mejor si ... - empezó a decir, pero Kao lo interrumpió volteando a verlo.

- Gulf, no te vamos a dejar en ningún sitio. Vamos a ir a mi casa, allá tienen una habitación donde podrán quedarse mientras buscamos una solución a esto... –

Aunque no te Pueda VerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora