~Capítulo Uno~

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Doncaster, Inglaterra.
1 de Octubre del 2014

Percibí que alguien entraba en mi cuarto, pero decidí ignorarlo por completo.

Era domingo. Dormiría hasta la hora que se me diera la regalada gana.

-¡Buen día!-

La voz de Jane llenó mis oidos.

-¡Vamos a desayunar!-

Dios mío iba a asesinarla.

Mis horas de sueño eran sagradas, nadie se metía con mis preciosas horas de sueño.

-Sshht- chisté. -¡Vete!-

- ¡Vamos, Emma!- insistió.

Abrió las cortinas de par en par, dejando entrar la luz del día a mi habitación y obligándome a esconder la cabeza bajo la almohada para no quedar ciega.

-¡Jane! - exclamé irritada

La oí reir, había cumplido su objetivo. Despertarme y fastidiarme. Dos en uno.

-¡Vamos! Hay que asear y ordenar antes de que Kaitlyn llegue.-

- ¡Vete al diablo!- le lancé el primer objeto que alcancé con mis manos. No estaba segura de haberle dado, ya que no estaba mirando.

-Hey qué genio. Te espero en la cocina- dijo, antes de abandonar mi cuarto.

Me cubrí totalmente con las sábanas y refunfuñé por unos minutos antes de disponerme a salir de la cama, en contra de mi voluntad.

Solo usaba a Kaitlyn como una excusa para irritarme. Eso le encantaba.

Bueno ¿a quién engañaba? Yo también adoraba hacerla enojar.

Había conocido a Jane el último año de secundaria. Tan solo un proyecto en historia había bastado para convertirnos en grandes amigas.

Fuimos a la misma preparatoria y fue ahí cuando Kaitlyn apareció.

Se nos unió solo unos meses depués de haber iniciado el primer año y desde entonces, se habían vuelto lo más importante en mi vida.

Las cosas cambiaron un poco cuando llegó el momento de dejar la escuela y enfrentarnos a una realidad más adulta.
Kait aun no se sentía con la seguridad de querer entrar a una universidad, por lo que sus padres decidieron llevársela a Londres para que trabajara con su tío, mientras decidía qué haría con su vida.

Jane y yo acordamos, luego de haberlo conversado con nuestras familias, comprar un departamento en el centro de la ciudad, para vivir juntas. Nos repartíamos las tareas diarias y dividíamos el dinero que era para las compras y el que utilizabamos para financiar la luz, el agua y el gas.

Yo, había decidido estudiar sicología, la cede no quedaba tan lejos de casa, asi que solía caminar hasta allá. Solamente en invierno pedía prestado el coche a mi padre para no tener que enfrentar la lluvia y el frío.

Jane, por su parte había escogido la neurología. Todos sabíamos que acabaría estudiando aquello, ya que eso era lo que siempre había deseado. Aunque algunas veces le había oído decir que su futuro era recoger la basura de las calles, una pequeña discusión sumado a un leve golpe, era suficiente para hacerla entrar en razón.

Nuestra vida cotidiana transcurría con calma y sencillez. Era muy agradable vivir con ella... solo había un pequeño problema...

"And we dance all night, to the best song ever. We knew every line now I can't remember how it goes but I know that I won't forget her..."

Moments∞ || Louis Tomlinson  #PBMinds2016 #EMPawardsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora