Capítulo 26

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Narra Sandra:

Noté que Nagore no se había marchado muy contenta pero eso no iba a hacer que cambiara mi decisión.

Ya estaba en maquillaje, hoy teníamos el penúltimo debate de Supervivientes y se veía a la gente con ganas de comenzara, justo cuando salí me encontré con Nagore en la puerta.

-Sandra: Hola. –Tras decir eso ella levantó su mirada de la pantalla del móvil.

-Nagore: Ay hola, ¿qué tal?

-Sandra: Oye cuando salgas de aquí, ¿te apetece pasarte por mi camerino antes de empezar?

-Nagore: Vale, en cuanto salga te aviso y voy para allá.

-Sandra: Perfecto, ahora nos vemos.

Nos despedimos y yo fui a mi camerino, desde ayer apenas habíamos hablado y nos habíamos enviado un par de mensajes. Sabía que no le hacía ninguna gracia que no aceptara el trabajo, quería hablar con mi representante y decirle que lo rechazaría y así quitarme este tema de encima cuanto antes y empezar a pensar en mis vacaciones.

Tras estar esperando un rato a que Nagore acabara en peluquería y maquillaje yo aproveché para estar un rato con las redes sociales.

*Suena la puerta*

-Nagore: ¿Se puede?

-Sandra: Claro, pasa.

-Nagore: ¿Luego vas a salir un rato o te irás a casa?

-Sandra: Todavía no lo sé, ¿por?

-Nagore: Por si querías que fuésemos las dos a tomar algo por ahí.

-Sandra: Vale, perfecto. –Me alegré ante su propuesta. -¿Has venido en tu coche o te han traído?

-Nagore: Me han traído.

-Sandra: Perfecto así podemos ir con mi coche.

Estuvimos comentando un poco más sobre como quedar a la salida y después fuimos a plató cada una por su camino.




Narra Nagore:

Había quedado con Sandra al salir, me apetecía estar con ella y aprovechar para ver si había cambiado de opinión, no quería insistirle mucho en el tema tampoco pero me daba mucha pena que no quisiera hacerlo por mí.

Durante el debate no pudimos hablar fuera de cámaras, tanto a ella como a mí siempre venía alguien para hablarnos por lo que tuvimos que esperar a que acabara.

Sandra despidió el programa y nada más hacerlo yo aproveche en un momento que estaba sola para ir al parking a esperarla. Apareció a los quince minutos más o menos y se la veía apurada.

-Sandra: Perdona. –Abrió el coche. –No me dejaban escapar. –Entramos ambas.

-Nagore: Les entiendo, yo tampoco lo haría. –Me abroché el cinturón. –Hoy todavía no me has dado un beso.

-Sandra: ¿Quieres uno? –Me miró pícaramente.

-Nagore: Mejor varios. –Se acercó a besarme y yo junté mis labios con los suyos.

Decidimos ir a un bar de copas que había cerca de mí casa, el dueño era mi amigo así que no tuvimos ningún problema.

Nos pedimos una copa y allí estaba, enfrente de mí dando un trago a su vaso.

-Nagore: Tenías sed. –Me reí ante su gesto.

-Sandra: Un poco. –Sonrió ella.

Desde que me había montado en su coche no podía dejar de pensar en cómo le sacaría el tema, no quería que ella se sintiera molesta ante mi insistencia, cuando por fin tenía claro como decírselo le empezó a sonar el móvil.

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