Solo tú

Capítulo 70

Narra Nagore:

Esta última semana apenas habíamos podido vernos, yo estaba con todo el lío del programa y ella empezaba ya este viernes con los debates. Escuché que durante la presentación de su programa le preguntaron por mí, y me hizo gracia esa forma que tuvo de escabullirse del periodista.

Esta noche por fin emitían el programa de Calleja con Sandra, me moría de ganas de verlo, me había contado tantas cosas de ese viaje que no podía perdérmelo.

-Nagore: Hoy por fin sale tu programa. -Aproveché mientras iba camino a Mediaset para llamarla.

-Sandra: Sí, que ganas tengo. -Se la escuchaba contenta.

-Nagore: ¿Por qué no te vienes a casa y lo vemos juntas?

-Sandra: Prefiero que lo veas tú sola, sin nadie alrededor.

-Nagore: Pero, ¿por qué no...? -No me dejó terminar la frase.

-Sandra: Si quieres cuando termine el programa llámame, pero créeme, míralo tú sola.

-Nagore: Quería verlo contigo... -No entendía que no quisiese que lo viéramos juntas, a mí me hacía mucha ilusión y me la acababa de chafar.

-Sandra: Nago, no te preocupes, si quieres mañana podemos vernos.

-Nagore: Vamos hablando, ¿vale?

-Sandra: Vale, un beso. -Nos despedimos y colgué.

Me dejó rayada la conversación, ¿por qué esa necesidad de que lo viese yo sola? No me quería enfadar, y mucho menos justo antes de grabar, pero no logré entenderla.

Pasé el día primero con grabaciones, luego reuniones y por la tarde tuve terapia, así que no paré hasta la hora de cenar. Me vino incluso hasta bien para no pensar mucho.

Una vez ya lista me acomodé en el sofá y puse la televisión, estaba ansiosa porque empezara ya, y se me hicieron bastante eternos los anuncios. No exagero si digo que cuando empezó intenté parpadear lo mínimo posible para no perderme nada.

"La última parte todavía fue normalizarlo más, a raíz que tengo una pareja como Nagore, que te enamoras en un plató de televisión... Me pasó en Gran Hermano VIP, y es que tenia que preguntarla y es que... es lo más fuerte que me ha pasado en mi vida..."

Me emocioné, sus palabras causaron eso en mí. No sé si fue el recuerdo de todo el proceso, todo lo que hemos vivido hasta llegar hasta hoy, verla a ella emocionada hablando de nosotras, o el escuchar eso salir de su boca, que no pude contener las lágrimas.

Volvió a nombrarme cuando consiguió subir a lo más alto de la montaña, de nuevo con las lágrimas rondando por sus mejillas. El programa fue espectacular, había sido sin duda el mejor de todos.

Cuando terminó pensé en llamarla como ella me había dicho, pero seguía sin entender muy bien el porqué de que yo lo viese sola.

-Sandra: ¿Qué haces aquí? -Puso una sonrisa nada más abrirme la puerta.

-Nagore: Te iba a llamar. -La besé. -Pero entonces no podría darte un beso.

-Sandra: ¿Lo has visto?

-Nagore: Claro que lo he visto, ¿por qué querías que lo viese sola?

-Sandra: Para que no estuvieses cohibida por nada. -Me abrazó. -¿Te ha gustado?

-Nagore: ¿Cómo no me va a gustar? -La miré con ilusión.

Narra Sandra: