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[Actualización 1/2]


A pesar de que nos fuimos del ensayo cinco minutos antes sin dar explicaciones a nadie, excepto excusas vacías, y corrimos para tomar el bus anterior al que hubiésemos tomado normalmente, llegamos apenas un poco antes que Seulgi y Suho. Todavía estaba recuperando el aire cuando escuché los pasos de los tacos acercándose a la puerta, pero logré saltar detrás de la cama antes de que se abriera. Me pegué al borde, escondiendo la mitad de mi cuerpo debajo, y cuando miré hacia la puerta por debajo de la cama me topé con una caja solitaria que se interponía en mi campo de visión.

—¿Qué quieres cenar? —preguntó Seulgi.

—Tengo que escribir un ensayo, así que haré mi propia cena y comeré aquí —respondió Baekhyun.

Se produjo un silencio; quizás a Seulgi le pareció extraño que tuviera una tarea como esa tan temprano en el cuatrimestre, pero no dijo nada al respecto. "De acuerdo", respondió y cerró la puerta de nuevo. Esta vez Baekhyun tuvo cuidado de pasar la traba. Antes de salir de mi escondite, me estiré para alcanzar la caja y la saqué mientras me levantaba. Me quedé sin palabras cuando pude ver con luz de qué se trataba.

—¿Estuviste practicando con esto? —pregunté, pensándolo sinceramente, mientras le enseñaba la caja de un consolador.

Cuando me vio, su cara se puso roja y saltó sobre la cama para arrebatármelo de las manos.

—¡No! —chilló.

Pestañeé porque no me parecía para tanto, no tenía por qué avergonzarse. "¿Estás bien?", preguntó Suho desde la sala.

—¡Sí, solo hice algo mal! —respondió Baekhyun y volvió a mirarme consternado—. Me lo regalaron para mi cumpleaños. Juraron que lo harían si seguía siendo virgen, yo no lo pedí —explicó en voz baja.

—¿Qué tiene de malo? —pregunté, sentándome en la cama.

—Me hace sentir un perdedor —dijo en un murmullo apenas comprensible y se agachó para devolver la caja a su escondite—. Me voy a bañar. No hagas ruido.

Descubrí que me sentía aliviado de que no estuviera practicando con eso. Una parte de mí pensó que ya tenía definido lo que quería a partir de ahora, que yo no entraba en sus planes y que había alguien nuevo (cuyo nombre empezaba con S) con quien quería tener su primera vez, no sin prepararse antes para dejarle una buena impresión.

Mientras lo esperaba, sumido en la oscuridad, mi móvil vibró y recordé que no lo había apagado. Mi hermano me preguntaba dónde estaba, ya que papá nos iba a invitar a cenar afuera. Respondí que no volvería esa noche y apagué el móvil. En ese mismo momento la pantalla del móvil de Baekhyun hizo luz en la oscuridad, desde la mesa de luz. Me tendí sobre mi estómago y lo cogí, poniendo como excusa conmigo mismo el aburrimiento. Vi que las notificaciones eran de nuestro grupo y entré a leer los últimos mensajes. Hacía rato que los chicos estaban solicitando su presencia con etiquetas, querían hablarle de un videojuego que estaba por salir. A mí también me interesaba, pero ya se habían dado por vencidos en intentar obtener mi atención por vía del chat. "Está ocupado", respondí a uno de los mensajes que lo etiquetaba para que dejaran de molestar.

"¿Quién es?", preguntó Chanyeol. "Adivina", respondí. "¿Jongdae?", intentó. Apoyé la cabeza sobre una mano y me tomé una foto con flash. No era mi intención salir con el ceño fruncido, pero no pude evitarlo. "Pensé que estabas saliendo con Yongsun", dijo Tao. El móvil se me resbaló de las manos y lo miré como si estuviera maldito. ¿Cómo sabía su nombre? ¿Y qué había querido insinuar? Jongdae apareció para esclarecer esto último. "Qué bajo, Soo, visitar a Baekhyun para encontrarte con su hermanita", dijo y luego preguntó quién era Yongsun. "Es la chica que conoció en la cita grupal. Estudiamos juntos. Cuando supo que era su amigo, me contó todo", explicó Tao.

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