Andrógino

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[Actualización 1/2]

Nota: Estos capítulos los tengo escritos hace rato, pero me ocurre que cuando llego a la etapa de una historia en la que se concreta el romance principal me cuesta darle un cierre, siento que es aburrido 😅 Pero ya comprendí que no hay forma de que me sienta mejor al respecto, así que no les haré esperar más. Aquí inicia la clausura de círculos. Quedará el capítulo final para otra ocasión. Gracias por acompañarme en este largo viaje por la carretera sinuosa de mi cabeza. Nunca logro sostener la sencillez de la idea original 😂💔

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Quedaban dos semanas para el festival y nuestros grupos estaban alarmados porque nos habíamos perdido un ensayo. Yo me sentía muy seguro, mi ánimo estaba por las nubes y creía que con eso podría combatir cualquier cosa en el escenario. Pero Baekhyun quería que demostráramos nuestro compromiso, así que los días restantes nos quedamos horas extras. Aunque esto fue como una pausa para nuestra incipiente relación, me contentaba con ver su sonrisa cuando nuestras miradas se cruzaban durante las prácticas. Si me sentía osado, le lanzaba un beso.

Nadie se daba cuenta de estas leves insinuaciones. En general, a ojos de los demás nuestra relación seguía siendo la misma. Baekhyun sostenía su postura sobre no sentir la necesidad de que todo el mundo conociera su identidad. Le bastaba con que las personas que le importaban lo supieran y lo apoyaran. Joohyun y Sehun eran los únicos al tanto de lo nuestro en el salón. Me habían dado sus felicitaciones el primer día, mientras esperaba a que Baekhyun se cambiara para acompañarlo a casa. El llavero que le había regalado, a juego con el mío, colgaba otra vez de su mochila.

En cuanto a hacer público lo nuestro, yo no tenía una opinión formada. Al principio estaba dispuesto a lo que fuera necesario para que él estuviera feliz. Pero me sentí un poco aliviado de que mi salida del clóset no tuviera que ser toda de golpe. Aunque estaba seguro que, en la eventualidad, no iba a soportar privarme de besar a Baekhyun cuando me naciera hacerlo, o tomar su mano o darle un abrazo. Y pronto descubriría que guardar los "te amo" en mi boca sería imposible; escalaban por mi garganta cada vez que me hacía reír, y él tenía un don para hacer cosas tontas.

Durante esas dos semanas, Baekhyun suspendió el contacto físico, excepto los besos. Pero ambos éramos buenos besadores y con solo eso podíamos avivar el incendio, por eso también prohibió que me quedara en su casa. Pasábamos nuestro tiempo libre afuera. Como no disponíamos de mucho, exprimíamos al máximo los minutos entre los ensayos y las clases o el regreso a casa.

A pesar de todas las negativas, los chicos insistieron en hacer algo para celebrar nuestra relación. El viernes de la primera semana nos citaron en el bar en el que les había presentado a Baekhyun. Llegué solo porque, dado que nos obligarían a celebrarlo de todos modos, él iba a ir con sus amigos. Los míos ya estaban esperando en la mesa larga al fondo del local. Parecía el cumpleaños de alguien. Me sentí avergonzado de que hicieran tan grande algo tan simple. No recordaba que hubiésemos hecho algo así por Jongdae. Apenas me vieron, se pusieron de pie, me rodearon con enormes sonrisas y Chanyeol, Tao y Jongin me sacudieron el cabello bruscamente. Golpeé sus manos, apartándolas de mí.

—No abusen de su estatura cuando Baekhyun llegue, ¿de acuerdo? —les pedí.

—Aw, mírenlo, todo preocupado de que manoseemos a su novio —dijo Chanyeol con una sonrisa boba, pellizcando mi mejilla.