Sara Presley
Siento mi cuerpo todo pesado en la cama, desde lo que ocurrió el día de ayer, no he salido de mi habitación. Creo que estoy hostigando mucho a Elián, tengo que darle su espacio. Por algún motivo acepto ser el novio de Maggie, tiene todo para ser feliz.
Este día no quiero ver a nadie, sigo en mi cama con los ojos llenos de lágrimas. Me siento mal y no sé cómo explicarlo.
Deseo volver a mi niñez, donde todos los problemas eran sencillos. No me quiero rendir pero cada vez que lo intento me caigo.
-Sara, ¿puedo pasar?-cuestiona mi abuela dando pequeños golpes en la puerta.
Me levanto de la cama con pereza arrugando las cobijas en mis manos, entonces abro la puerta y miro a mi abuela con cara de espanto.
-¡¿Que te paso en la mejilla?!- pregunta horrorizada.
-Ammm, me caí llegando a casa-digo son una sonrisa falsa.
-Tienes que ser cuidadosa, cariño.
-¿Que necesitas, abuela?
—No te ves muy bien que digamos-acaricia mi mejilla.
Les juro que en ese momento quiero llorar y decirle a mi abuela todos los problemas que estoy pasando. Solo quiero alguien que me comprenda. Pero ella no es la indicada para esto.
—Me desvele acabando un proyecto de la escuela. Solo me falta dormir, eso es todo.
—Bueno querida, solo vengo a avisarte que tu abuelo y yo saldremos.
-¿A donde?-murmuro tallando mis ojos.
-Hay otro donante de corazón, solo tenemos que verificar si tiene tus características-dice masajeando mis manos.
Le doy un pequeño apretón y suelto sus manos con cuidado.
-Cuídense-digo cerrando la puerta.
Me vuelvo a recostar en la cama para taparme con todas las cobijas y no permitir que la luz pase ante mis ojos. Escucho como cierran la puerta del piso de abajo.
Aun no comprendo como Maggie se enteró sobre el puente. ¿Sera que Elián le explico que lo hostigaba y ella tuvo que tomar medidas muy impulsivas? Aunque no creo que Elián sea así, siempre que tenemos problemas lo aclaramos. Pero solo los dos, sin intervenciones de nadie.
La fantasía que cree al pensar que seríamos una pareja fue patética. Jamás seremos nada. Él es normal y yo....
Vuelven a bajar las lágrimas por mis mejillas, ocasionando que el dolor de cabeza vuelva. Todos mis pensamientos están revueltos. No puedo evitar pensar en la miserable vida que tengo. No hablo con nadie, la persona que apreciaba tiene novia y lo peor es que no puedo hacer nunca las cosas bien.
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Hermosos Errores
Teen Fiction°°Primer libro de la "Biología Artificial" Elián Holmes es nuevo en la escuela de California, él es un chico muy ordenado y organizado en todos aspectos. Le gusta que las cosas sean como él quiere. Odia socializar con las personas. Por otro lado Sa...