[Capítulo 36]

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   Point Of View _____

   Estaba en la fila de cafetería esperando para sacar mi comida con Travis a mi lado. Era increíble que en ese momento me estuviera tomando de la mano cuando en la mañana solo eramos amigos/compañeros de cuarto.
   Luego de tomar las bandejas con la comida, fuimos a sentarnos en nuestros lugares habituales. Mare llegó corriendo y se dejó caer en el asiento a mi lado.

   —¡Ya me tienes que contar todo lo que paso con ustedes dos! —dijo medio gritando.

   —No pasó mucho —susurré avergonzada—. Las noticias vuelan.

   —Y que lo digas agregó Travis mirándome con una de sus medias sonrisas sexys.

   —Bien... —dijo Mare confundida— ¿Me cuentan o no?

   —Después te cuento —respondí mirando mi plato.

   —¡Hey Maddox! ¿Ya te la llevaste a tu cama? —gritó Chris. Todo el equipo de futbol comenzó a reírse— ¿Las inscripciones están abiertas? Quiero ser el siguiente.

   Vi a Travis tensarse y entré en acción.

   —Chris —grité y él me miro—. No creo que encuentres a alguien que haga todo lo que yo le hice a Travis contigo. Además, dudo que quieras esperar, él estará conmigo por un largo tiempo —dije alargando la palabra y posicionándome al lado de Travis para darle un beso en la boca. Él tardo un poco en devolvérmelo, pero al final lo hizo.

   Al separarnos por falta de aire, todo el equipo nos estaba mirando. Chris tenía la boca abierta de par en par. Claro, era la primera vez que contestaba uno de sus insultos, además de insinuar... Muchas cosas.
   No dejaban de mirarme, así que tomé la manzana que había sobre mi bandeja y me fui al patio. Lo que había dicho había sido un error, pero ya no había vuelta atrás. Además, Travis era igual a mí, tenía mi mismo temperamento. Si no hubiera intervenido, en este momento Chris no tendría dientes.

   —_____. —Oí a alguien susurrar mi nombre. No reconocía la voz ya que estaba muy lejos— _____. —Esta vez se escucho más cerca... Era Travis.

   —Aquí estoy —dije y di una mordida a la manzana.

   —¿Por qué dijiste eso? —preguntó sentándose a mi lado— Tu y yo no...

   —Travis, ya sé que no tuvimos nada, pero te conozco muy bien y, si yo no intervenía, en este momento probablemente Chris estaría tirado en el suelo de la cafetería con tu puño en su ojo.

   —Touchè —dijo con una pronunciación perfecta—. Pero, ¿Tienes idea de el lío en que te metiste? No dejarán de molestarte...

   —O sea, que todo será igual. Travis no me importa lo que piensen los demás, solo me importan Shepley, Mare y tú. Los demás pueden irse a la ver...

   —Prefiero que no termines esa frase —dijo Travis tomándome de la barbilla—. Sé donde termina.

   Ambos reímos y nos levantamos para ir al departamento de Travis. Sí, nos saltamos todas las demás clases.
   Al llegar fui directo a la habitación y me puse un short de tela y una blusa holgada. Volví a la cocina y vi a Travis preparar palomitas.

   —¿Veremos una película? —pregunté indiferente. No me importaba mucho lo que fueramos a hacer, con tal de hacer algo.

   —Sí, busca alguna.

   Estaba por ir a cambiar de canal cuando recordé las historias que debería tener el sofá del living, así que fui a la habitación a buscar una manta para arrojarla encima.
   Luego busqué el control y comencé a cambiar hasta encontrar una buena película. Travis volvió con un bowl lleno de palomitas y me miró enarcando una ceja. Sólo hice una mueca señalando el sofá, así que él se sentó y miramos la televisión.

* * * * *

   Eran las 7:30 pm. Cuando recibí una llamada de Adam.

   —Chica Mala, hoy dentro de una hora, ¿Vienes?

   —Claro —respondí animada y corte la llamada—. Mare —llamé. Ella estaba en la cocina—. Tengo una pelea en una hora, necesito que me cubras. —Ella asintió y volvió con Shepley.

   Media hora después estaba cambiándome para irme cuando el teléfono de Shepley comenzó a sonar.

   —Hola —contestó él— ... Sí... ¿A las 8:30?... Claro, ahí estaremos... Adiós. —Él cortó— Travis, hoy conocerás a la Chica Mala de Morgan, iremos a verla.

   Quise golpear mi cabeza contra la pared. ¿Ellos irían a verme? Solté un suspiro. Debería reformular mi plan. Travis me miró, como si me pidiera permiso para ir. Sólo me encogí de hombros y fui a buscar mis cosas. Si ellos irían, debía cambiarme de ropa. En mi pequeña mochila negra guardé ropa y las cintas de boxeo. Me dejé puesta la misma ropa y al salir de la habitación vi a Travis y Shepley ya listos para irse.

   —Chicos —dije a lo que ellos me miraron—, y Mare —rieron—. Saldré a caminar, vuelvo en un rato.

   —Ok, pero no tardes —dijo Travis.

   —Tranquilo, volveré —dije cerrando la puerta detrás de mi.

Good girls are bad girls [Done]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora