[Disponible en físico] | Todo comenzó en esa estación

13: ¿Quieres jugar sucio? Pues jugaremos sucio

Intenté aparentar que no me afectaba aunque en realidad, no entendía porque me comportaba de esa manera. Era cierto que Jace me parecía atractivo, objetivamente era algo innegable, pero estaba segura que mis sentimientos no iban más allá. Aun así, no sabía si era por el alcohol o por curiosidad propia, pero necesitaba saber qué tenían exactamente esos dos.

―Entonces, ¿están saliendo o no?

―Tienen algo raro. ―Lo miré extrañada―. Es una historia muy larga y no creo que yo sea el indicado para contártela, pero básicamente, son como una especie de ex pareja que se acuesta de vez en cuando. Aunque mi hermana sigue loca por Jace, pero dudo que él sienta lo mismo.

Toda mi piel se puso pálida al instante. ¿Tenían sexo de vez en cuando? Solo de imaginarme a esos dos en la misma cama hacía que tuviera arcadas.

«Pero, ¿por qué me importaba tanto? ¡Si no me gustaba!»

Matt notó mi cara de preocupación, o asco, o mezcla de las dos, ―No te tienes que preocupar por ello, él sabe lo que hace y es mayorcito para cuidarse. No creo que se hagan daño el uno al otro, llevan en esta situación bastante tiempo.

―No me preocupa si se hacen daño o no ―espeté ante la tontería que acababa de soltar.

―Entonces, ¿qué más te da que estén juntos? ―Me penetró con la mirada.

―Era simple curiosidad ―expresé con neutralidad y él pareció conformarse con mi respuesta.

―Vamos a dejar de hablar de los tortolitos y hagamos algo. ¿Te apetece ir a la piscina? ―preguntó animado.

―Lo que menos me apetece ahora es bañarme, además, no he traído biquini ni nada ―contesté excusándome.

―No pasa nada, puedes quedarte en el bordillo mientras hablamos. ―Me sonrió y me dirigí hacia la piscina aceptando su propuesta.

Como él estaba en su casa, se fue a poner el bañador y yo lo esperé en la zona de la piscina mientras observaba el ambiente. Había unas 6 personas bañándose y lo bueno era que entre ellos no estaban ni Jace ni la hermana de Matt, cosa que me alivió. No me apetecía verlos.

―¡BUU! ―Sentí unas manos en mis hombros y me giré sobresaltada.

―Joder ―dije sosteniendo las manos en mi pecho―. Que susto Jace ―contesté recuperando el aire y él se empezó a reír descontroladamente.

―¿Qué haces aquí? ¿Te vas a bañar? ―Bajó la mirada comprobando que aún seguía vestida.

―No, estoy esperando a Matt. ―Me crucé de brazos.

―Así que, ¿te vas a bañar con él? ―Alzó la ceja.

―No. Se va a bañar solo. Yo no me he traído nada para poder meterme, porque como no me has avisado que veníamos aquí... ―Lo escruté con la mirada―. Igualmente, no me hubiera bañado, no conozco a nadie y tampoco me apetece mojarme.

―Pues a mí sí que me apetece, pero no mojarte eh. ―Mi mente sucia lo interpretó de otra manera y me empecé a poner tensa―. ¿Me ayudas a quitarme la camiseta? ―preguntó incitándome.

―¿Tú qué te crees?¿Qué estoy a tu servicio? Está claro que no ―me reí―. Qué te ayude la pelirrojita esa ―solté sin ni siquiera pensarlo.

―¿Hablas de Emma? ―Alzó la ceja―. ¿Estás celosa? ―Cortó la distancia que quedaba entre nosotros―. Te noto molesta por haber estado con ella en vez de contigo.

―¿Pero qué estás diciendo? En todo caso estoy agradecida con ella. Dudo que hubiera aguantado durante toda la noche tu egocentrismo. ―Le aparté a un lado.