Nuevas Batallas

Capítulo 84: Marinette

Unos días habían transcurrido desde el día en que, desafortunadamente, Félix y Bridgette regresaron sus miraculos a Amelie. Félix había optado por quedarse unos días más junto a la chica que amaba. Se habían arreglado, no había más malos entendidos entre ellos. El inglés regresaba esta ocasión a París en tren. 

Con la mente perdida. Parte de su corazón extrañando a Wolfy y su papel como superhéroe. Y su otra parte, estaba totalmente feliz porque todo marchaba bien con Bridgette. Recordó esas palabras de Su-Han un día: "A veces la solución para arreglar todo, es dejar ir". Soltó una risa, pues en ese momento, pensó que la solución era dejar a Bridgette. No a su miraculous. 

El sonido de arribo a París lo hizo despejar por completo su mente. Bajó del tren y Gorila ya lo esperaba en la estación. Esa nublada tarde, llegó a su habitación, tan solitario como aquella gran mansión. Fue hacia su escritorio y sonrió con notoria nostalgia, le faltaba Wolfy. Sacudió su cabeza al mirar un sobre blanco en el escritorio. 

"Para Félix". Lo abrió con rapidez, sin imaginar de quién era. De una mirada serena, la transformó segundo a segundo en preocupación. "El aclamado Black Wolf resultó ser Félix Graham, decepcionante. Es una lástima que ni tú ni tu compañera me puedan dar la posibilidad de arrebatarles sus miraculos como lo haré con Ladybug y Chat Noir. Cuento contigo para darles el aviso". 

Y no, no había más dudas, o si quiera un "tal vez fue". Porque tenía la certeza que era de Hawk Moth. Parte de él se tranquilizaba de que Bridgette no estuviera ahí. Ahora la pregunta para él era otra y sumamente importante. Una pregunta que quizás Marinette podía ayudarle a responder. 

Marinette estaba en su habitación remendando unas prendas cuando Tikki llamó su atención. - Marinette, tienes un mensaje de Félix - le informó. La azabache se levantó de la pequeña máquina de coser con una sonrisa. - Así que el chico enamorado se vuelve a comunicar - dijo sonriente. Sonrisa que al instante se desvaneció al leer su mensaje. 

"Hawk Moth sabe quien soy, necesito hablar contigo. Te veo en casa del señor tortuga al terminar mi clase de italiano". Tal como habían acordado, se vieron ahí. - ¿Cómo lo explicas entonces? - le preguntó Félix con molestia a la azabache. - ¡Hawk Moth fue quien le dijo a la Legión de los miraculous! ¡De ese modo se enteraron! - continuó con más preocupación que molestia en sus palabras. 

- ¿Qué objetivo tendría Hawk Moth en decirlo? - cuestionó Marinette. - ¡Descubrirnos a Bridgette y a mí! ¿Qué más? - respondió él. Marinette alzó las manos en son de paz. - Bueno, tranquilo - la azabache suspiró. - No creo que hubiera sido eso solamente, porque de ser así, ¿cómo llegó directo hasta ti? - preguntó Marinette. 

Fu intervino. - Marinette tiene razón, llegó a ti directamente, tal como una flecha acierta en el centro de la diana - mencionó. Para sorpresa de todos, Su-Han no había mencionado nada. Con el aire caliente de su té siendo inhalado por él, el guardián se dispuso a hablar llamando la atención de Félix y Marinette. 

Carraspeó antes de emitir palabra alguna. - Los dos piensan que saben mucho acerca de los miraculous, y también se lo diría a ese gato si estuviera aquí. Y quizás tengan razón, si conocen bastante - se levantó y los encaró. - Pero les falta astucia para entender su entorno. Discuten inútilmente sobre cómo Hawk Moth dio con Félix, cómo la Legión se enteró de sus poderes -

- Pero no son capaces de pensar en la posibilidad de que Hawk Moth ya sabía quien eras tú bajo esa máscara, Félix - el rubio y la azabache se miraron entre sí. Mínima posibilidad, máxima probabilidad. - Eso quiere decir que - comenzó a decir Félix. Su-Han asintió. - Lo de la Legión fue una vil trampa, fue una pantalla de humo -