Nuevas Batallas

Capítulo 13: Advertencia

Adrien alimentó a Plagga y se puso frente a él en el escritorio. El kwami terminó de comer y seguía viendo a Adrien con preocupación. – Y bien...- le dijo Adrien persuasivo. -El queso es fantástico Adrien- el chico negó. -Ya sabes a lo que me refiero, ¿qué quisiste decir con "ella no se da cuenta cuando te tiene enfrente"? ah? – Plagga voló frente a él y suspiró. – En algún momento te debías enterar, pero esto no debe salir de nosotros, Ladybug se molestaría si se entera- le recalcó el kwami a su portador. -Tú ya conoces a Ladybug bajo la máscara- el chico lo vio sorprendido. – Quiere decir... que ya... ¿he estado frente a ella sin ser Ladybug? – el kwami asintió lentamente. – Tu comportamiento en ciertas cosas es diferente cuando eres Chat Noir y Adrien, por eso ella ni siquiera intuye que tú puedas ser Chat Noir-

Adrien pensaba en las chicas que conocía y con las que ha hablado, pero... ¿quién puede ser Ladybug? -No le des vueltas a este asunto, recuerda que no es conveniente que sepas su identidad ni ella la tuya- le recordó Plagga al chico.

La noche pasó tranquila para ambos héroes, sin más akumatizados, pero aun así, la confusión inundaba el corazón de ambos. A la mañana siguiente, Marinette recibió un mensaje de Kagami en su teléfono. "Necesito hablar contigo saliendo de clases. Te veo en el parque cerca de la escuela". Marinette miró extrañada el mensaje. - ¿De qué querrá hablar Kagami contigo? - preguntó la pequeña kwami algo confundida. Marinette levantó ambos hombros. -No tengo idea, quizá sobre Adrien- dijo la chica restándole importancia. -Vamos Tikki, es hora de irnos- dijo la chica mientras tomaba su mochila, la kwami entró en su bolso y ambas se dirigieron a la escuela.

Marinette iba en la entrada de la escuela cuando se encontró con Nathaniel. -Buen día Marinette- le dijo el pelirrojo sonriente. -Hola Nathaniel- le respondió ella con una sonrisa. Mientras se dirigían al salón, el chico le comentaba a ella que su último cómic, donde ella era Ladybug, había gustado mucho en la escuela. Marinette lo miraba con una sonrisa de alegría de que él hiciera lo que le gustara y tuviera éxito. Adrien ya se encontraba en el salón viendo hacia afuera cuando vio que ambos chicos venían muy sonrientes. Ambos entraron aun con una sonrisa en sus rostros, Adrien quería saludar a Marinette, pero se detuvo ya que ella ni siquiera volteó a verlo, pero seguía con la vista en ella. – Estoy muy feliz por ti Nathaniel- le dijo ella antes de tomar su lugar. -Y todo es gracias a ti Marinette- dijo el pelirrojo dándole un dulce beso en la mejilla.

Adrien vio ese beso y algo se revolvió en su estómago. Una pequeña molestia recorrió su cuerpo de pies a cabeza. Adrien sólo volteó a ver su escritorio y comenzó a sacar sus cosas de la mochila. Nino se sentó a su lado y notó raro a Adrien. -Viejo, ¿estás bien? – preguntó el chico a su mejor amigo. -Adrien volteó a ver a Nino. -Si amigo todo bien-. Nino volteó en dirección a Nathaniel y quiso hablar del tema con Adrien. -Parece que a Nathaniel todavía le gusta Marinette- dijo el chico en voz baja. - ¿Todavía? – preguntó Adrien algo sorprendido. -Viejo recuerda, hace tiempo Nathaniel se le declaró a Marinette, el día que fue akumatizado por Hawk Moth en Demoilustrador- Adrien comenzó a recordar ese día, aun no era tan amigo de Marinette en ese entonces, pero si notó demasiado el interés de él por su amiga. -Si, algo recuerdo-. -No es de extrañarse que aun le guste Marinette- le dijo Nino. Adrien volteó a verlo algo confundido. - ¿Por qué no? – preguntó Adrien. -Viejo si que eres extraño- le dijo Nino riendo. – Mira- le señaló a Marinette que estaba en el lugar de Juleka hablando con ella. Adrien la observaba fijamente. – Es bonita, inteligente y talentosa, sin mencionar que es dulce, tierna y de buen corazón-

Adrien lo miró sorprendido. Sabía que Marinette era eso y más de lo que Nino le mencionó. Pero... ¿por qué le molestaba que otros chicos notaran todo eso en ella? Sólo guardó silencio. – No es necesario que Marinette te guste para notar todo eso viejo- terminó de decir el chico y siguió escuchando música. Adrien seguía analizando esas palabras. La primera clase comenzó y el resto siguió en completa tranquilidad. La campana anunció finalmente la salida, Marinette se dio prisa para verse con Kagami en el parque y efectivamente, la japonesa ya estaba ahí esperándola.