Marinette asintió. – Muchísimas gracias – la azabache le pagó a la mujer y se retiró del lugar. Fue con sus amigos quienes estaban escuchando a unas personas tocando música. – Marinette, ya regresaste – le dijo Adrien. Ella asintió con una sonrisa. - ¿Algo interesante con la adivina? – Ella negó. – Nada importante, sólo... cosas – dijo risueña. - ¡Banderillas! – dijo con entusiasmo y yendo hacia el pequeño puesto. Adrien esbozó una sonrisa al verla tan contenta, sonrisa que no pasó desapercibida por Alya y Nino. – Creo que a Adrien le gusta Marinette – le dijo Nino en un susurro a Alya. Alya lo miró sorprendida. - ¿Qué? – le dijo en tono bajo. Nino asintió. La azabache regresó junto a ellos. - ¡Están deliciosas! – dijo dándole una mordida. Alya y Nino se apartaron de ellos a hablar un poco, pero sin despegar la mirada del par.
Marinette, tienes un poco de mostaza en la boca – Marinette ladeó la cabeza e intentó limpiarse, pero sólo consiguió ensuciarse más. A lo que Adrien soltó una risa y ella de igual modo. El rubio tomó una servilleta del puesto de banderillas y se dispuso a limpiar a Marinette. Se acercó a ella aun riendo y Marinette cerró un poco los ojos. Adrien limpió la comisura del labio de la chica con el papel y notó cada uno de los rasgos que la hacían tan hermosa. Sus mejillas ligeramente ruborizadas, sus pecas, como su nariz se fruncía un poco al tener cerrados los ojos y la blancura de su piel, sobre todo, llamaron su atención esos labios tan lindos, ligeramente rosas y húmedos. Recordó que sintió cuando la besó y sonrió de lado. Ella abrió los ojos y conectó con los de Adrien. Fijaron la mirada uno en el otro. El corazón de Marinette comenzó a latir a mil por hora. Era increíble que Adrien siguiera provocando cosas en ella. Adrien se sonrojó y soltó una pequeña risa. – Listo, perfecta – dijo tirando el papel a la basura.
Gracias Adrien – dijo Marinette dándole una dulce sonrisa. Alya y Nino los miraban con una sonrisa pícara. – Definitivamente están hechos para estar juntos – dijo Alya sonriendo. Adrien y Marinette se perdieron de la vista de ellos al llegar a un puesto de disfraces. Marinette se puso una barba falsa y Adrien comenzó a reír, contagiándola del momento. Adrien por su lado, optó por una peluca de mujer con una diadema y comenzó a hacer gestos de mujer frente a Marinette, haciéndola reír sin parar. Era tan fácil para ellos estar juntos. Adrien lo comprobaba a cada instante y, ese desagradable momento en el parque, se disipó un poco por esa aventura junto a ella.
Marinette era demasiado importante para él, lo aceptaba. Pero él sentía que había algo que no lo dejaba ver más allá. La felicidad duró poco, pues un akumatizado atacó el festival. Marinette se perdió de la vista de Adrien y rápidamente se transformó en Ladybug. Adrien hizo lo mismo y Chat Noir vio la luz del día. Ladybug le dirigió la palabra a su compañero lo menos posible, únicamente lo hizo por ser necesario. No lo odiaba, no. El odio era una palabra demasiado grande para lo que sentía. Chat Noir sería la última persona que ella odiaría. Ambos se limitaron a cumplir con su trabajo en París como era de esperarse. Minutos después, el amuleto encantado regresó a la ciudad y al festival a la completa normalidad, devolviéndole la tranquilidad a todos los parisinos. Mientras tanto en su guarida, Hawk Moth con gran molestia, se transformó en Gabriel Agreste.
Señor, debe tranquilizarse. Un día conseguiremos nuestro objetivo – le dijo Nathalie. Cada día que pasa, veo ese objetivo más lejano. Ladybug y Chat Noir siempre arruinan mis planes – dijo saliendo de la guarida junto a ella y dirigiéndose a su oficina de trabajo. Gabriel comenzó a leer el grimorio, hasta que se encontró con una página que llamó su atención. "El miraculous del lobo negro, que concede el poder la debilidad, es capaz de frenar a cualquier oponente sin que éste ponga resistencia. La flecha del antiguo arquero del bosque, puede debilitar a quién sea, sin importar su poder". Gabriel arqueó una ceja. – Noroo, ¿dónde puedo encontrar ese miraculous? – preguntó. – Ese miraculous no está en la caja de Ladybug, amo – respondió temeroso.
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Nuevas Batallas
FanfictionDespués de la Batalla por los miraculous, Marinette es la nueva guardiana. Un gran peso en sus hombros se hace presente, pero tiene a su fiel amigo y compañero que siempre está junto a ella. ¿Cómo irán las cosas entre Adrien y Marinette, ahora que...