Capítulo 17

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El sonido de la puerta cerrarse seguido de un largo suspiro le indicó a Sooyoung que su día de pesadilla había terminado.

- Ese chico, Lee Jongsuk - su padre apuntaba con el tenedor sin dejar de comer - Me agrada.

- Termina de cenar Soo - su madre ordenó dejando sin muchas opciones a la bailarina.

Había pasado un mes desde que su noviazgo con el universitario comenzó. Habían ganado un concurso de baile intraescolar y el equipo de fútbol avanzó a las semifinales. La vida parecía seguir su ritmo.

Todos los días eran rutinarios, Jongsuk la esperaba afuera de su casa para llevarla a la escuela, se besaban provocando que Yves perdiera algunas clases y continuaba con sus estudios hasta que era hora de salir. Si no había inventado una excusa lo suficientemente buena, el chico estaría en la puerta esperándola para ir a comer, pasar la tarde juntos y llevarla a su casa nuevamente, dónde en ocasiones cenaban junto a sus padres.

Yves se preguntaba si realmente el chico iba a la universidad, pues no parecía interesado en sus estudios. No pasó mucho en darse cuenta que tenía una beca deportiva y eso lo mantenía a flote.

Casi no veía a Jiwoo, solo en ocasiones por los pasillos o cuando tenía suerte y almorzaban juntas. La existencia de una nueva tutora de química imposibilitó las pocas interacciones que tenía con la menor, sobre todo cuando la tutora era nada más y nada menos que Kim Jungeun.

Conforme los días avanzaban, su paciencia disminuía. Se molestaba porque sus notas con esfuerzo se mantenían de forma aprobatoria, se molestaba porque no podía salir con sus amigas y en lugar de que ellas se molestasen terminaban diciéndole "oh está bien, sal con tu lindo novio, a nosotras nos ves todos los días". Incluso un día vio a Haseul charlando con Yerim en la biblioteca provocándole una inmensa ira. Después de su última clase, le gritó diciéndole que había sido clara y no la quería junto a ella, pues no aceptaría que su mejor amiga fuera cercana a raritas. Se arrepintió al instante, pero todo se le estaba yendo de las manos.

- ¿Qué tal la escuela Soo? ¿Has elegido a qué universidad ir?

- ¡Hay una escuela preciosa en Francia! - interrumpió a su esposo - Diseño de modas, si tomas la decisión de ir, no cortaremos tus alas cariño.

- En realidad... - respiró, no quería tener esa conversación pero estaba cansada - Me gustaría estudiar algo más.

- Oh...

- ¿Algo más? ¿De qué se trata Sooyoung?

- Bien... yo amm, últimamente... comencé a interesarme en la química.

- ¿Química? - susurró la mamá, con notoria decepción - Creo que los adolescentes tienen distintas metas ¿No es así amor? - le sonrió a su padre - La industria cosmética será un gran negocio.

- Hay una ingeniería...

- ¿Ingeniería? - fue el turno de su padre - Maldita sea Sooyoung ¿Qué estupidez estás diciendo?

- Estás segura cariño...

- ¡Tonterías! - fue su turno de interrumpir - ¿Acaso crees que eres hombre o qué sucede contigo?

- Cariño en esas escuelas solo asisten varones y puede ser peligroso.

- ¡Más que peligroso! - nuevamente alzó la voz - No pienso permitir burlas sobre mi hija siendo una maldita lesbiana.

- ¡Papá! - quiso gritar, pero su voz salió en un gemido reprimido. No tenía caso. Ha Sooyoung no tenía permitido ir a la universidad de sus sueños. Ha Sooyoung no podía incluso sentirse atraída hacia las mujeres.

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