Almas Destinadas // Miles Fairchild. [✔️]

02

Tn POV // 2 semanas después

Habían pasado 2 semanas desde que salí del instituto, la convivencia con Kate y Rose (Su amiga) iba muy bien, mi mente dice que el pequeño lugar es cómodo como para que tres personas vivan en el, pero realmente no sé lo que ellas piensen; pues me la paso todo el día, todos los días en el centro juvenil practicando arqueria. Me gustaría aprender más deportes, pero no hay otro que llame mi atención.

Cada vez que voy a salir le digo a Kate que voy a despejarme un rato, a ver películas u obras de teatro, incluso juegos de mesa con otras personas porque, según ella, me podría lastimar practicando deportes.

Mi actitud mejoró considerablemente, puesto que Kate y Rose me tratan como una persona y no como a una loca, así que no tengo que ser grosera con ellas porque no se merecen ese trato, a fin de cuentas no me han hecho nada malo.

En este momento estaba practicando arqueria, suponía que mi compromiso con el deporte me ayudaba a haber avanzado tanto en solo dos semanas; aunque siguiera siendo una novata.

Mientras preparaba mi siguiente tiro escuché la voz de Kate llamarme por lo que mi mano tembló pero logré bajar el arco antes de lanzar la flecha. Tal vez no le gustaría porque no quería que me hiciera daño, pero decidí ignorarla y volví a levantar el arco.

Estiré la flecha hasta que quedó a pocos centímetros de mi rostro y finalmente la solté logrando dar en el blanco.

- Vaya, eres muy buena - Miré a Kate que estaba acercándose a mí.

- Oh, hola Kate - Me hice la qué no la había escuchado hace apenas un momento - Bueno, creo que ya te diste cuenta que no juego ajedrez - Reí nerviosamente

- Sí, ya me di cuenta - Me sonrió - Me hubiera gustado que me dijeras que eras tan buena en arqueria - Comenzó a caminar para salir del campo y yo dejé las cosas en su lugar para seguirla.

- ¿Enserio? - Pregunté con notable sorpresa.

- Sí, - Aseguró y me miró con ternura - ¿Sabes? Me gusta tu pequeño acento francés.

- ¿De verdad? - Asintió - ¿Por qué?

- No sé, me parece lindo considerando que no sabes francés - Respondió - Para no desviarme del tema, te vine a buscar.

- Y, ¿Para qué me buscabas? - Pregunté curiosa.

- Pues conseguí trabajo como institutriz de una pequeña - Respondió muy feliz.

- Que gran noticia - Le sonreí - Pero eso quiere decir que me vas a dejar con Rose.

- Si eso es lo que quieres... - Alargó.

- ¿Voy a ir contigo? - Pregunté emocionada. No me molestaba estar con Rose, el problema era que hasta ahora la conocía y no había tanta confianza como para que eso pasara.

- Claro que sí, - Aseguró - Soy tu tutora legal, no te puedo dejar botada por ahí con cualquiera - Sonreí.

- Esto va a ser genial - Ambas salimos del centro juvenil con una gran sonrisa.

...

Al día siguiente estábamos empacando las cosas que nos faltaban, puesto que ya tenía más ropa porqué Kate no podía soportar verme todo el tiempo con las mismas cinco prendas y dos pijamas, así que me compró más.