Almas Destinadas // Miles Fairchild. [✔️]

Temp 2 - Cap 06

Tn POV

- Tn, despierta - Escuché la voz de Miles mientras me movía levemente de un hombro.

Me quejé acomodándome mejor en su pecho, estaba tan cansada y algo adolorida por obvias razones, lo único que quería en estos momentos era dormir.

- Mon amour despierta, Tn - Insistió y yo moví la cabeza.

- Quiero dormir, déjame - Pedí adormilada y sentí como quitaba una mano de mi espalda quitándome un mechón de cabello de la cara.

- Muñeca - Pidió - Debemos bajar, levántate.

- Estoy cansada - Me quejé acomodando la cabeza en su pecho, de verdad no tenía ánimos de levantarme.

- Yo también, pero debemos bajar antes de que suban a buscarnos - Me quejé una vez más y dejé mi cara contra su pecho - A menos que no te moleste qué nos vean así.

- ¿Y si solo bajas tú? - Sugerí colocando una mano en su pecho.

- Debemos bajar los dos - Fingí sollozar y después me senté en su cama cubriendo mi pecho con las sábanas - Sé que estás cansada, ¿Te duele algo?

- Las piernas, lo normal - Moví la cabeza y me acomodé el cabello - ¿Y tú?

- Me arden los hombros - Respondió con desinterés y se sentó a mi lado - Ve a ducharte y nos vemos abajo, ¿Sí?

Sujetó mi rostro entre sus manos y yo asentí para que luego él dejara un beso en mi frente.

Me levanté en dirección a su baño y me duche mientras masajeaba mis cadera y piernas porque sí sentía algo de dolor, además de que tenía un poco inflamada la cadera, la ventaja era que mis pantalones me quedaban anchos.

Salí del baño y volví a vestirme para luego acomodarme frente a un espejo y observar mi cuello con detenimiento. Pude visualizar unos pequeños chupetones pero solo eran perceptibles si te fijabas demasiado.

Observé mis manos y noté unas leves marcas rojas en mis muñecas por lo que reí un poco y después salí en dirección a la sala.

Al llegar abajo vi a Miles y Flora jugando con sus manos por lo que me acerqué a ellos y me senté a su lado.

- Hola Tn - Me saludó Flora y Miles me volteó a ver recostando su cabeza en el sillón dejando a la vista su cuello, en el cual podía percibirse un chupeton.

- Hola Flora - La saludé fingiendo no haber visto la marca entre morado y rojo que tenía Miles en el cuello. Él rió un poco y luego bajó la cabeza.

- Ya casi llega - Habló Flora - La Sra Groose salió a buscarla.

- Dios santo, no puede ser - Se quejó Miles recostando su cabeza en mi hombro, me miró y yo sonreí.

Kate entró en la sala y se sentó frente a nosotros, Flora se acercó a ella y se sentó a su lado.

- Hola, ¿De qué hablan? - Preguntó abrazando a Flora de lado.

- De que ya casi llega Jessica - Respondió Flora y Miles se quejó hundiendo su cabeza en la curva de mi cuello y hombro.

- ¿Pasa algo con eso? - Le preguntó Kate a Miles curiosa.