Cᴏɴᴛɪɢᴏ / Tʀᴜᴇɴᴏ 🌜

Cap 19. 🌜

Ana

(Nota de la autora; quiero aclarar que esto pasa tres días después de lo acontecido con Mateo, ¿Okay?, Okay sigamos)

—¡Ya dije que no quiero ver a nadie!.— alcé la voz para aquella persona que estaba del otro lado de la puerta.

Otro día más recostada en mi cama, pensando ¿por qué a mí?, Llorando mientras no veo el como darle un futuro a hijo o hija.

Quisiera saber por qué dios o quién sea que esté allá arriba, me diga por qué entre tantas pibas, me tuvo que embarazar a mi…

Digo, yo siempre he sido buena, amable y humilde, ¿Que hice mal?.

¿Que le hice a la piba que me insemino?.

Aún sigo un poco molesta, no es como algo normal de la vida, esa mina ni si quiera tiene idea de dónde vivo, ni mi trabajo, ni mis estudios, ni mi vida en general.

Para ella fue fácil hacer la cagada y hacerce la víctima, mientras que yo aquí, me quedo pensando que hacer.

Literal nose si soy muy exagerado de mi parte pero realmente estoy desesperada, ¿Que se supone que tengo que hacer?, Mi vida se fue a la mierda de un día para otro.

—¡Abre esta puerta de inmediatamente!.— la voz de mi gran amiga rezono por el otro lado de la mencionada

—¡Juli no quiero ver a nadie!.— me acomode en mi cama

A mi mejor amiga no la había visto desde el día que me enteré que sería mamá, de hecho en el camino de regreso a mi casa nadie dijo ni una sola palabra.

—Nana por favor…— la voz entre cortada de Juli me hizo fruncir el seño

—¿Juli estás bien?.— pregunté preocupada

—Nana por favor abre.— sollozo

Rápidamente me pare de mi cómoda cama, para ir corriendo a la puerta de mi pieza, dónde abrí esta misma.

Cuando la abrí pude encontrarme con Juli con los ojos llorosos, mientras las lágrimas recorrían sus mejillas.

Manuel estaba detrás de ella, quien estaba totalmente callado viéndome con lastima.

Odio que me vean así…

—Eu, ¿Que pasa Juli?.— me acerque a ella tocando su brazo levemente

Enseguida la pelinegra me abrazó, dándome un fuerte apretón mientras lloraba —L-o sie-nto ta-nto Nana, fu-e mi culpa,… fue mi culpa.— susurro en mi oído —V-os n-o que-rías ir, y y-o te obligue… por favor perdóname, no te quiero perder.— finalizó entre lágrimas

Me sorprendió un poco su acción, ya que en ningún momento pensé que esto era culpa de Juli.

Nadie tiene la culpa más que la hija de puta de la doctora, pero ese no es el caso ahora.

—Esta así desde hace días.— Manuel me dijo mientras yo tenía aún a Juli abrazada —Perdonanos Nana, por no haber venido antes,… creímos que nesecitabas tu espacio.— me miró apenado