Dannyelle Shelby [ Peaky Blinders]

CHAPTER XXV

Hoy tenía que acompañar a papá a pedir la llave de unos almacenes pero sobre todo el que nos llamaba especial atención era el almacén 6.

Entramos y hay un hombre sentado detrás de la mesa con un montón de papeles.

- Sus hermanos vinieron a mi casa a decir que los Peaky Blinders quieren hacer negocios conmigo. - Empezó a hablar este hombre.

-¿No me tiene miedo? - Pregunta papa sentándose y sacando un cigarrillo.

- A ver, que es lo que quiere de un simple trabajador 

- Miedo... Al pobre señor Fably bebió demasiado, fue hacia las vías del tren detrás de la fábrica, el tren apareció y quedó su cuerpo echo cachitos.

- Se a lo que se dedica... Dígame qué quiere.

Yo me di la vuelta en la silla giratoria mirando un cartel grande con todos los almacenes.

- Eso. - Dije señalando el cartel - El almacén completo. ¿Tiene las llaves de las naves cuatro, cinco y seis?

- si, las tengo.

- ¿Que hay en la cuatro? - Pregunto papa.

- Planchas 3, 14 y 21 listos para pintar.

- ¿Y en la cinco? 

- El taller de pintura y piezas.

- Y Luego esta la seis... - Dije poniéndome de nuevo mirando a este hombre - Deme la llaves de la nave seis. 

-Solo hay productos viejos almacenados

-Deme las llaves de la nave 6 - Volví a pedir.

Este señor se levanta, las coge y se las da a papa después de levantarnos, papa le extiende dinero pero este hombre no parece quererlo.

- Deselo a su fundación. - Dice este.

Papa aun sosteniendole la mirada le mete el dinero en una especie de bolsillo que le cuelga del mantel que lleva puesto.

Nos dirigimos a la puerta, la abro y la aguanto para que papa pueda pasar y oímos  a este hombre hablarnos de nuevo.

- Solo lo he echo por la seguridad de mi familia...

Salimos y vamos  en dirección a la nave 6.

- Quédate en la puerta. Yo miro - Dice papa.

- Vale...- Dije aburrida.

•••

Después teníamos que hablar con unas personas y encima delante iba a estar un cura que no se exactamente qué pinta ahí.

Llegamos y parece estar solo el cura, en la espera a los que faltan el cura comienza hablar.

- ¿Y solo habrá jovencitos en su instituto benéfico o niñas también?

- De todo

- Ah... ¿Separados? Ya sabes cómo pueden ponerse esas criaturitas.

- ¿ Y su gente? Decían que vendrían a las 5

- Tienen sus propias leyes, es más difícil de entender quienes son que coger una pastilla de jabón mojada.

- Los he investigado

- Ya... Bueno... 

- Danny ve a mirar si vienen. - Me dijo papa. 

Camine por donde habíamos entrado, mire a los dos lados, no vi a nadie reconocible pero espere un rato por si de la nada aparecían.