La mañana no había sido tan placentera para el empresario, para su mala suerte, su mejor amigo le había pedido de favor llevar a su cachorra al colegio, como si fuese alguna clase de niñero que obviamente él no era. Sin embargo, le debía algunos favores a Park Jimin, el alfa azabache no tenía otra alternativa que aceptar a la niña de mejillas redondas y cabellera rubia en su departamento. Tampoco podía pedirle a su asistente que él la llevara ya que, si su madre, Rosanne Park llegaba a enterarse no solo Jimin estaría sentenciado a muerte, sino también él.
– Tio Taehyung, ¿es cierto que los niños se comen los mocos para impresionar? – el de ojos miel quiso rodar los ojos.
Cuidar a niños ajenos estaba muy lejos de sus contemplaciones, él era un hombre de negocios. No una persona que se consideraba cercana a cualquier contacto con seres humanos. Simplemente su carácter era así, rígido y antipático. Raramente algo le llegaba a conmover y no era porque no tuviese sentimientos, sino que toda su vida fue preparado para ser el hombre que es actualmente.
Uno de los empresarios más importantes del país, la envidia de todo alfa y el anhelo prohibido de cualquier persona. El magnate era un hombre alto de piel bronceada y evidente porte, cabellera rebelde y ondulada, ojos miel y rasgos masculinos tan definidos que se emparejan con su nata elegancia.
– ¿Quién te dijo eso?. – preguntó el alto mientras le extendía un vaso de café a la niña.
– Mami no me deja tomar bebidas de grandes Tio. –
Taehyung no tenía ni la más remota idea de que él café poseía un rango de edad especifico, su mente estaba ocupada en números y definiciones como costo beneficio. No en lo que podría una niña de cuatro años ingerir o no.
– Por supuesto. – ironizó el alfa retirando la taza de la niña.
La menor movía sus extremidades en la alta barra. Aunque la niña no lo dijera, para ella, su tio Taehyung era muy cool aunque su papi dijera que tenia cara de gruñón creía que solo necesitaba un abrazo para sentirse mejor. Quizas era lo que su tio necesitaba.
– Lo vi en televisión, aunque mami me dijo que me alejara de esos niños. – recordó la pequeña platica que había tenido con su progenitora alfa.
– Hazle caso a tu madre, ya que parece ser la más cuerda. –
Park Jimin, omega y mejor amigo del empresario solía ser un tanto caprichoso e instintivo, muy sentimental para algunas ocasiones o demasiado dramático para aceptar algún error. El hombre solía contradecir la inteligencia de su propia hija, porque era obvio que, a pesar de tener solo cuatro años la pequeña niña tenía una mente más desarrollada que él resto de cachorros llorones de su edad.
– Mami dijo que pegue a los niños que quieran acercarse a mi. – Taehyung levantó una ceja intrigado por el comentario de la alfa. Como cualquiera de su rango, quizás entendía porque su madre daba esa clase de consejos.
ESTÁS LEYENDO
Teach me to Love | VSOO
Fanfiction"Demasiado rosa para alguien que solo usa el negro como sombra de sí mismo"