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Ha pasado una semana desde el desplante del alfa frente a su mejor amigo, el azabache se encontraba mirando el cielo a través de los grandes y luminosos cristales de su oficina, era de las pocas veces que Jeon Taehyung se tomaba un tiempo que él consideraba "perdido" para pensar en el origen de sus acciones..
Desde hace una semana que esa incomodidad en su interior no lo deja seguir, cuando él está muy decido a ignorar, la imagen de esa omega y el alfa de cabello trigo regresa a su mente haciéndole una mala pasada. ¿Por qué simplemente no puede ignorarlo como él resto de las cosas que no deberían importarle? Incluso su lado humano reconoce que está tomándole mucho tiempo analizar una situación que debería de agradecer, pues al fin parece ser que esa omega entrometida lo ha dejado de considerar. No más loncheras, no más mensajes y ni hablar de la actitud ser muy distinta a sus encuentros anteriores.
Es un hecho, esa omega ha desistido.
Su lobo aúlla lastimero, no quiere aceptar la noticia. Suspirando pesadamente decide levantarse de su silla giratoria para tomar un poco de whiskey y relajar su cuerpo.
– Te ves de la mierda. – el azabache se da la vuelta viendo al omega rubio entrar a su oficina con una carpeta entre sus manos.
– Necesitas llevarle esto a tu madre. – movió la carpeta, cada paso más acerca de él.
Jimin no es tonto, ha observado en silencio el comportamiento de su mejor amigo percatándose de como Taehyung parecía mucho más pensativo en los últimos días.
– Es para la convención de beneficencia dentro de unos meses. La señora Jeon se encarga de ese evento personalmente, así que, este es el presupuesto del año. – completó
– Mis nervios no son los mejores. – le sonrió inocente el omega quien se ha bebido el trago que ha preparado.
– ¿Hay alguna forma de que vayas tú?. –
– No puedes seguir evitando de esa forma a tu madre Taehyung, quizás si le dieras la oportunidad puedes ver que no es tan mala como lo recuerdas. –
El alto alfa quiso reírse, pero lo cierto es, su mejor amigo tenía razón, ese complejo de incomodidad siempre estaba presente cuando está cerca de su progenitora.
– Quizás puedan platicar un momento. –
– ¿Y según tú, de qué?. – ni su madre y él tenían temas de conversación lo suficientemente relevantes para captar la atención del orador contrario.
– Temas de amor podría ser uno de ellos. – sugirió Jimin con la completa intención de que la señora Jeon pudiese ver lo mismo que él. Su hijo estaba inquieto y desesperado, pero no reconocía el hecho de saber que ha encontrado a su compañera y tenía cierta atracción hacía esa castaña
– Jimin. – le miró el de ojos miel con cierto desagrado. – No seas ridículo. Si pregunto mi madre empezará a hacerse ideas muy alejadas de la realidad. – el omega se abstuvo de rodar los ojos.
– Oh podrías discutir sobre el profesionalismo laboral y esas mierdas que creas como excusa para pensar en algo que tú lobo viene gritándolo desde hace semanas. –
Discutir con ese omega era una batalla perdida, por ejemplo, Jimin lo había obligado a no asistir al instituto de "Pulgosa" para hablar con ese director y sustentar algunos términos de "profesionalismo".
Según Jimin era exagerada su actitud, pero desde su perspectiva no es así, quizás no demostrase muy bien sus sentimientos o pensamientos. Pero la pulgosa es su adoración, no dejaría que esa niña se dejara llevar por malos momentos.
– Oh puedes ir tú con mi madre y yo me encargo de Jirosé. – le sonrió el alfa
¿Por qué de repente esa extraña atención a su cachorra? Jimin se tragó el gesto de burla que evidenciaba la necesidad del lobo de Taehyung en ver a la castaña. Está usando a su pequeña cachorra como pretexto de su falta de atención en el amor. Sin embargo, Jimin igual lo hacía cuando Rosé se molestaba con él, Jimin le hacía llegar un ramo de rosas a través de su hijita.
– Trato. – extendió la mano el omega .
– Pero no quiero enterarme de que has hecho un escandalo por tus malditos celos de alfa frustrado. –
El rubió posee una boca muy filosa. Sabe que la palabra "celos" haría sobre pensar a su mejor amigo. Y claro que lo ha hecho con toda la intensión del alfa darse cuenta del comportamiento acumulado ser parte de sus emociones no expresadas
Después de unas cuantas horas. El omega rubio miró sobre su eje la gran puerta de la mansión "Jeon".
– Oh Jiminie, cariño ¿Qué haces allí parado en la puerta?. – el mencionado se dio la vuelta para encontrarse con una muy bonita mujer. La señora Jeon se encontraba con algunas cosas de jardinería entre sus manos. Parece que la azabache tuvo un día productivo en el jardín de esa extenuante casa.
– Hola señora Jeon. – le saludó cordial.
Pues a pesar de conocerla de años, ese símbolo de respeto no se perdía al tratarse de la madre de su mejor amigo.
– ¿Qué te trae por aquí, Minie?. – el omega suspiró.
– Tengo algunas cosas que hablar con usted, es sobre Taehyung. – al escuchar el nombre de su hijo y observar el rostro serio del hermoso omega frente a ella supo que es un tema en cuestión delicado.
La mayor se arrepentía de muchas cosas en vida, pero la que más peso carga sobre sus hombros es hacer sufrir a su hijo de esa manera en su niñez. Cuando veía a Taehyung, solo observa la perfección hecha persona.
Ese concepto que su esposo se esmeró en construir en su pequeño niño quien era obligado a comportarse como un adulto por mantener "apariencias", al final terminaron por romper a su hermoso cachorro de ojos miel. Ahora la indiferencia lo caracteriza pues Taehyung podía ser muy inteligente, nadie se atrevía a hacer comparación con el atractivo alfa, pero en cuestiones cotidianas, era totalmente lo puesto.
La señora rompió, sin querer, el lazo que la unía a un afecto profundo con su hijo y quien ahora está tratando de volver a crear.
