Encanto Inexperto (Fanfic Rubius) (EN EDICIÓN)

CAPÍTULO 7: Huésped

— Bienvenida a mi departamento —hice un gesto para que pasara.

Lina sonrió y entró. Se soltó la mochila negra que llevaba al hombro y la llevó como si fuera una bolsa de mano.

— ¿Dónde la puedo dejar? —preguntó viendo a todas partes.

— Oh, pues... —señalé el sofá— Ahí, si quieres.

Dio unos cuantos pasos al sofá y dejó su mochila encima de un cojín.

— No puede ser... —susurró ella, viendo la Xbox One que tenía puesta ahí—. ¡Dios, Rubén!

Yo me reí y voy a su lado—. ¿Qué sucede?

— No sabes lo mucho que me gustan los videojuegos —tomó un mando de Xbox y lo examinó con una gran sonrisa.

— ¡Olé! Una chica gamer —sonreí ampliamente—. Pensé que no existían.

Lina se rió y negó con la cabeza varias veces, ocasionando que mechones de cabello se le vinieran al rostro, los cuales, se los apartó desesperada.

— ¡Hostia! —Exclamé abriendo los ojos más de lo normal—. No te he ofrecido nada, qué mal anfitrión... ¿Quieres agua, zumito...?

— Agua, por favor.

— ¿Nada más? —me encaminé a la cocina y agarré un par de vasos.

— Sí, así estoy bien —anunció desde el otro lado de la pared.

Aparte de los vasos de agua, llevé un paquete de galletas, porque yo tenía hambre y me costaba creer que Lina no la tuviera. Después de todo llevaba, vete a saber cuántos, días viviendo en la calle.

Al llegar de nuevo al salón donde estaba mi invitada, enciendo la tele y nos sentamos en silencio. Le doy su vaso y me susurra un "Gracias".

Agarré una galleta y le doy una mordida, miro a Lina y muevo el paquete de galletas hacia ella, ofreciéndole.

— Come —dije con la boca llena—. Yo sé que quieres.

Ella se hizo del rogar y no fue hasta que casi la obligue a abrir la boca para que comiera la galleta que yo le estampaba contra los labios. Nos reímos bastante.

A pesar de que pasamos todos los canales, no encontramos algo entretenido, así que por mi mente cruzó una maravillosa idea...

— Dices que te gustan los videojuegos, ¿cierto? —la volteo a ver con una ceja levantada.

Ella alza las cejas y mueve la cabeza positivamente.

— Oh, shit —canturreo al mismo tiempo que tomaba los mandos del Xbox y le pasaba uno a ella— ¿Te apetece?

Lina tomó el mando con una gran sonrisa y guiñó un ojo—. Eso no se pregunta, Rubén.

[...]

— ¡MALDICIÓN! —Exclamé levantándome del sofá— ¡ME CAÍ DEL MAPA Y NO ME LO CREO!

Lina reía a más no poder y me señalaba burlona. Ella resultó ser bastante buena en Halo e íbamos empate en una partida entre los dos, pero por manco no me fijé por dónde iba y salté por accidente al 'vacío del mapa'. Lo flipo.

— Buen 'duelo', nada mal para una mujer —dije chocando los puños con ella.

— No sé si debo sentirme halagada u ofendida.

— Depende de cómo lo interpretes —reí, alzando una ceja.

Lina se hizo la pensativa, haciéndome reír de nuevo, se veía tierna cuando hacía ese gesto.

— Lo tomaré bien.

Raspy llegó de no sé dónde y se subió al sofá donde Lina estaba sentada. Se le acercó un poco temerosa y mi amiga empezó a acariciarla dulcemente. Raspy ronroneó y se terminó acostando a un lado suyo.

Entrecerré mis ojos. Raspberry nunca se dejaba acariciar, y ahora resultaba que con Lina sí... estuve un poco celoso.

— Qué mona —comentó sin verme.

— Si —sonreí, sentándome enseguida de ellas.

— ¿Cómo se llama? —pregunto curiosa.

— ¿Cómo que cómo se llama?

— Qué graciosito.

— Que es broma, que es broma —respondí riendo— Se llama Raspberry McFagotcakes, y el otro, que no sé dónde está, Wilson.

Nos quedamos en silencio, observando a Raspy, quien no se movió de su lugar. Lina no daba señales de que diría algo.

Después, para relajar la tensión, se me ocurrió enseñarle el piso un poco, ya que no me agradaba mucho no hablar.

— Ven, te enseñaré mi cuarto de 'grabación'.

— Vale —se levantó teniendo cuidado con Raspy y me siguió.

Atravesamos el pasillo por donde había unos espejos en la pared y no evito mirar el reflejo: Lina me seguía atrás con la vista por los suelos. Deduje que se sentía avergonzada.

Llegamos a la puerta del cuarto y la abro lentamente, enciendo la luz y la hago pasar.

— Te presento mi ha—

— ¡Ohhh! —exclamó emocionada, tomando el gorrito de 'Jake el Perro' de un mueble— ¡Qué bonito! ¡Mola!

Se lo colocó y la verdad es que le quedaba muy bien... Muy. Dirigió su mirada hacia mí y tuve que quitar la expresión embobada que supuse que llevaba. Era tan guapa, que es casi imposible no quitarle la vista de encima. Pero no quiero que piense que soy un pedófilo.

Lina sonrió dulcemente y yo atiné en devolverle la sonrisa.

— Típica habitación de Pc gamer —miró a todos lados sonriendo—. La verdad es que está genial.

— Gracias.

Le seguí dando el 'tour' de la casa, le señalé donde se encontraba el baño, la lavandería, cocina, bla bla.

Sin darnos cuenta, ya era muy tarde y Lina estaba que se caía del sueño, por eso decidí ofrecerle mi cama para que durmiera. Pero ella se aferró a dormir en el sofá y no pude hacerla cambiar de opinión.

Me puse el pijama y me recosté en la colcha de la cama. Revisé un momento las redes sociales hasta que concilié un poco de sueño y cierro los ojos.

Esto puede ser el inicio de una nueva amistad... O eso espero.

***
Heeey, ¿cómo están?:3
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