Encanto Inexperto (Fanfic Rubius) (EN EDICIÓN)

CAPÍTULO 8: Decisiones

— Narra Lina —

A continuación, después de que Rubén me ayudara a preparar unas cuantas sábanas para poder dormir en el sofá, él se despidió con un "Buenas noches" acompañado de una sonrisa radiante.

Luego de que se fuera, recargué mi espalda en la pared y analicé la situación en la que estaba.

Yo, Lina Anette Wood, está en el departamento de un chico de veinticuatro años que resultó ser un famoso Youtuber... ¿Acaso estoy soñando?

Creo que no.

Hice una respiración profunda y de mi mochila saqué una blusa negra con un estampado de Naruto que antes usaba de pijama. Me quedaba bastante grande, pero era cómoda.

Me la pongo y me recuesto en el sofá.

No me había puesto a pensar seriamente en si me hospedaría aquí, con Rubius de acompañante. No es que le tuviera mucha confianza, pero demostraba ser un buen chico (o eso me dio a entender en el tiempo que hemos hablado).

Supuse que tendría que decidirme pronto, para no arrepentirme luego.

Estaba dispuesta a ver mis ventajas y desventajas, sin embargo, mis párpados se tornaron pesados y me costaba un montón mantenerlos abiertos y cuando menos lo pensé, me sumí en un profundo sueño.

[...]

Desperté a causa de que sentía algo encima de mi estómago. Entrecerré los ojos a causa del cansancio y volteo a ver de qué se trata... Era... ¿Wilson?

— Hey... —dije con voz ronca.

Le acaricié el lomo unos cuantos segundos, pero él optó por irse y dejarme sola.

Me levanté del sofá y estiré mis extremidades a la vez que soltaba un gran suspiro. Hace bastante que no dormía decentemente como lo acabo de hacer.

Como me lo imagine, Rubén no era de los chicos que se levantaban temprano, así que aproveche que dormía para utilizar su baño y darme una ducha rápida, tampoco planeaba durar una hora en ello.

Tomé unos jeans oscuros, una blusa azul celeste y las vans azules de siempre.

Fui al baño, pasé dentro y cierro la puerta a seguro.

— Narra Rubén —

No sé por cual razón, pero logré despertar más temprano de lo normal. Tal vez era porque si dormí las horas que debería todos los días.

Sin levantarme de la cama, agarro mi móvil y veo un Whatsapp de Mangel, a eso de las tres de la mañana de este día, unas horas después de que Lina y yo fuésemos a dormir.

El vicioso de Mangel estaba en línea.

Mi Mangel:
¡¿Estás?! ¡Skype y TTT ahorita nomáh!
Enviado: 3:12 am.

Hostia, se me pasó por alto que ayer quedamos Mangel, Alex y yo que grabaríamos TTT...

Yo:
Perdonad, lo olvidé... ¡Pero adivina qué! :D

No tardó en responderme con un mensaje de voz.

Mi Mangel:
¿Te fuiste de fiesta sin nosotros? Lo imaginé...

Yo:
¿EHHH? Eso nunca >:(
Me refería a otra cosa :p

Mi Mangel:
Dale pues, ¿qué paso?

Estuve a punto de responderle, pero escuché un sonido proveniente de la cocina. Así que, como el hombre que soy, fui a ver de qué se trataba.

— Narra Lina —