Mi Omega [Bl]

Capítulo 8: coincidencia

Por fin hoy he descubierto lo qué era el premio para los ganadores del concurso, todos los participantes fuimos reunidos en la sala de evento donde eventualmente todos esperaban con impaciencia, por lo que me dijeron, eran dos premios. La primera es una cena completamente gratis y seis millones, por lo que se divide un millón para cada uno de los integrantes del equipo.

Por supuesto que a todos les interesaba el millón, incluso pensaban en las cosas que harían con ese dinero, algo que yo no tenía pensado, de todas formas, ¿Cuál es la probabilidad de que por primera vez ganemos un evento que califica el jefe?

A decir verdad, parecía que yo era el único que no se ilusionaba, algo que sin duda me hace ver como una persona negativa, pero es verdad ¿hay siquiera una probabilidad? No estoy seguro de que exista, a menos que el jefe quiera algo.

Lo bueno es que hay bocadillos, como a los ganadores los anunciarían media hora antes de irnos, tenía hambre y todos mientras esperábamos, disfrutábamos de los bocadillos, incluso reíamos animadamente por las tonterías que decían algunos integrantes de otra sección.

Todo estaba muy tranquilo, al menos hasta que el jefe entró en la sala y se encaminó al escenario para dar los resultados, por supuesto que todos se acercaron a él con cierta impaciencia, pero como es de esperarse, no pueden dar al ganador sin antes dar una charla motivacional.

Por mi parte me mantenía desconectado del resto, estaba disfrutando de un delicioso bocadillo con extra queso hasta que hubo un largo silencio, este silencio duró unos segundos hasta que los teléfonos de todos comenzaron a sonar tras recibir la notificación de un correo.

Yo eventualmente saqué mi móvil al igual que todos para ver el nombre de los ganadores, sin duda hubo varios lloriqueos y al mismo tiempo, un chillido de emoción por parte de mi equipo tras leer sus nombres.

Mi mente al leer nuestros nombres se mantuvo en blanco, no sabía cómo reaccionar debido a la noticia, prácticamente fui arrastrado hasta el escenario por mi equipo quienes parecían eufóricos. Esto era curioso, no me esperaba recibir un premio justamente porque pensé que con lo de esta mañana él no quería acercarse a mí nuevamente.

Nuestro jefe nos felicitaba a cada uno de nosotros a medida que entregaba un cheque y una pequeña cajita que nos pedía abrir, dentro se encontraba un accesorio de corbata, tenía la forma de un bolígrafo, pero cuando llegó mi turno de recibir el premio, él se mostró nervioso, podía notar sus manos temblando un poco, incluso cuando abrí la cajita noté un broche de corbata con forma de llave.

Era lindo, pero ¿por qué el mío es diferente? Es de oro, parece más costoso debido a los pequeños detalles que tenía, algo que sin duda era llamativo, todos miraron el broche con cierta sorpresa y aquello aumentó el doble cuando el jefe tomó el pequeño accesorio y me lo puso en la corbata.

–Felicitaciones...–me dijo en un tono casi avergonzado, además como tomaban fotografías, me sentí un poco nervioso, puesto a que por un instante estuvimos muy cerca.

Una vez que todo terminó, regresamos a nuestro sitio de trabajo en busca de nuestras cosas, mis compañeros claramente estaban muy emocionados, además antes de salir de aquel sitio de eventos, el jefe nos dijo que lo esperáramos unos minutos para hablar sobre la cena.

–¿Creen que él nos acompañe? –preguntó Fernanda.

–No lo sé, pero ¡mira! –chilló Elena mostrándole su móvil– la fotografía es perfecta.

–Oh...–soltó Gustavo viendo su móvil– hay un nuevo shippeo– agregó mostrándome su móvil.

Era una fotografía en donde estábamos el jefe y yo, era justo el momento en el que me estaba poniendo el broche en la corbata, además como en la imagen se reflejaba su nerviosismo, había muchos comentarios en el post del trabajo comentando "lo lindos" que nos vemos, incluso había comentarios de "nueva pareja en el trabajo"

Como aquella página de la empresa no es la oficial, no creí que haría revuelo, además en aquella página comparten todo lo informal que ocurra, incluso fotos de torpezas o caídas, sin embargo, cuando miré la cantidad de interacciones que tenía, me sentí muy incómodo.

–Me voy a sentir celoso– comentó Izan viendo la fotografía.

–Lamento la espera– habló nuestro jefe apareciendo detrás de Patrick quien pegó un salto tras encontrarse distraído– ¿Dónde quieren cenar? –preguntó viendo su móvil– la empresa pagará todo, pero necesito el nombre.

–¿Usted irá con nosotros, jefe? –preguntó Elena con emoción.

–Si quieren...–respondió él, evitando mi mirada.

–Santa madre– soltó Izan llamando la atención de todos, aunque como era de esperarse se puso muy nervioso y comentó que "recordó algo" mientras me miraba con sorpresa y cierta emoción.

–Entonces ¡vamos! –chilló Fernanda– ¡hoy comeré extra! –añadió encaminándose a la salida.

Era temprano como para cenar, pero igualmente nos encaminamos todos juntos hasta el bar que solemos frecuentas, sin duda el jefe miraba todo con curiosidad y se dejaba arrastrar por mi equipo, además lo sentaron frente a mí, lo que me hacía sentir incómodo.

–Pss– me decía Izan para llamar mi atención, por lo que me incliné para que pudiera hablarme al oído– ¿no notas algo curioso en el jefe? –preguntó por lo que inmediatamente lo miré queriendo ver lo que mantenía a Izan tan raro.

–Hmm...–pensé mirándolo sin saber qué era aquello con lo que debía quedarme.

–Su corbata...–me dijo con una sonrisa– curiosamente combina con la tuya.

A veces Izan dice muchas tonterías, pero esta sin duda sobrepasaba todas las que posiblemente me pudo haber dicho anteriormente, ya que consiguió que me pusiera nervioso tras ver un broche con forma de corazón como accesorio en su corbata, lo peor es que añadió un "tú tienes la llave de su corazón" algo que sin duda era ridículo.

Seguramente es una coincidencia, no creo que él se haya molestado en comprar los broches para que el suyo y el mío combinen, es sin duda ilógico, aunque a pesar de saber lo ilógico que sonaba, aun así, me sentí avergonzado y no comprendía la razón.

Cuando lo volví a mirar sus ojos por un instante se cruzaron con los míos, podía notar su incomodidad por estar en un ambiente más ruidoso, pero a pesar de ello, no se iba, de hecho, lo normal es que un jefe se quede sólo un par de minutos, máximo una hora antes de irse, sin embargo, a pesar de que pronto todos comenzamos a beber, él se quedó y podía notar su mirada en mí cuando yo miraba hacia otro lado.

Parecía que deseaba decirme algo, podía notarlo ansioso por hablarme, sólo que mantenía su cabeza agachada casi como si esperara el momento perfecto y ese sin duda no se estaba presentando.

[...Elizabeth Carter...]

Yo digo que el accesorio de corbata, es simple coincidencia, a David no le gusta tanto como para invertir su tiempo y buscar un accesorio solamente para Jordán... 7v7 es impensable que su orgullo se lo permita... o sí...? 

Por cierto, pésimo servicio la encargada de recordarme que tenía que publicar xD ¿ves mi niña? no es sencillo acordarse, siempre pasa algo jajaj pero se te quiere 💕