Capítulo 40: FINAL

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No sé si pueda abandonar este lugar pronto.

En un momento como este es cuando me doy cuenta de que no soy tan fuerte como en realidad aparento, mi corazón duele, me siento devastado y no puedo dejar de sufrir.

Mis manos siguen esposadas a unos grilletes, la única diferencia de cuando llegué es que ahora hay una cadena que me da un poco de movilidad, pero no la suficiente como para poder escapar.

—Ese bastardo murió— me dijo hace unos días.

No sé cuánto tiempo llevo aquí, la luz del sol es algo difícil de ver en un lugar tan frío y desolado como este.

Asumo que han pasado seis o siete días, las horas aquí avanzan lento, constantemente estoy rodeado de oscuridad, mis ojos fueron vendados debido a que él odiaba la forma en la que lo miraba.

Intentó tener sexo conmigo, después de despertar aquel día y oír sus planes para crear un ambiente romántico, él por supuesto que intentó repetir la situación, pero por supuesto mi cuerpo no reaccionó.

Se puso furioso al ver que mi pene no era capaz de ponerse duro, ¿qué más esperaba? Soy un alfa que tiene a su propio omega, es evidente que no puedo pensar en otro que no sea mi esposo.

No puedo dejar de preguntarme si está bien, ¿estará comiendo? Imagino que debe sentirse devastado.

Quisiera abrazarlo, desearía tenerlo entre mis brazos para calmar su sufrimiento ahora que ha perdido a nuestro bebé.

¿Cómo terminamos así? Nosotros éramos felices, teníamos una vida repleta de amor y felicidad, ¿por qué ahora estamos así? ¿Cuál fue el mal que hicimos? ¿Por qué debemos pagarlo con todo esto?

Teníamos en mente formar una familia, nosotros estábamos muy entusiasmados por nuestro segundo bebé, ambos teníamos tantos planes para el futuro, ¿y todo para qué?

Duele pensar en que David está sufriendo y que no puedo hacer nada para consolarlo, mi único alivio es saber que al menos tiene a mis padres cerca. Sé que ellos servirán como retención, ellos consolaran su llanto y le darán el apoyo que necesita.

Ahora mismo sólo puedo pensar en él, mi cuerpo duele casi tanto como mi corazón, siento que estoy en un descenso constante en el que cada vez me siento más débil, ni siquiera sé cómo soy capaz de abrir los ojos todos los días y ver el agujero en el que este lunático me tiene encerrado.

Lo peor es que, a pesar de todo lo anterior, en lo único que pienso es en David y en nuestro bebé, sólo puedo pensar en que debería estar allí con ellos, cuidándolos y dándoles el apoyo que merecen.

Se siente horrible estar aquí, por un lado porque si no consigo la atención necesaria, puedo perder la pierna izquierda.

El idiota en un ataque de furia enterró una navaja contra mi pierna, lo hizo con fuerza, buscando que gritara de dolor en venganza por el sufrimiento que le estaba causando por lo que él nombró: no ser un novio ejemplar.

Por supuesto que al ver la sangre ensuciar mi pantalón, rápidamente se asustó, sus manos comenzaron a temblar mientras me decía: no quise hacerlo, ¡tú me obligaste!

Su estado actual es difícil de descubrir, cuando se acerca existen dos posibilidades. Por un momento puede ser tranquilo y amable, sin embargo, cuando algo no sale como él lo tenía planeado se frustra y con violencia trata de "enseñarme" a decir o hacer lo que él quiere.

Sus cuidados para mi pierna se centran en agua y vendas, no me da analgésicos debido a que considera que son dañinos para la salud. Tampoco utiliza alcohol, ya que eso podría dolerme y según él: jamás me lastimaría.

Mi Omega [Bl]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora