Hilo De Fuego / KyojuroRengokuxLectora

Capítulo 14

Capítulo 14: Danza.

Algo pasaba con _____ quien había estado recibiendo más sangre de Muzan.

Los demonios que no devoraban humanos tenían más control sobre su cuerpo o simplemente se descontrolaban y desesperaban por ingerir humanos.

____ siempre ingirio sangre de Muzan, no perdía el control y a cambio recibía más fuerza.

Muzan le entrgaba cada vez más y veía como la chica aún podía estar debajo de la luz del sol, era el demonio prefecto, siempre lo esperó pero aún así no podía matarla.

El peor de los demonios tenía una debilidad.

Por esa razón planeaba que ___ fuera su mano derecha una vez que no tuviera sus sentimientos humanos, Por Madia era que ____ tenia esos sentimientos de esperanza de que alguien la quisiera o recordará con cariño.

Era lo que más anhelaba y podía volverse una obsesión en cualquier momento.

Ser amada.

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Narrador Omnisciente
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Habían transcurrido dos meses.

—Cada vez tienes misiones más frecuentes—Hablo Shinobu, estaba sentada junto a Madia—Tienes poco tiempo para entrenar y debes estar cansada. ¿Cómo se siente Sanemi de no poder entrenar a su Tsuguko?

—No hemos logrado entrenar desde hace semanas, cada vez que terminó una misión Sanemi-San tiene otra—Comentó con frustración.

—Me gustaría que eso pasará con Tomioka pero siempre lo veo caminando por aquí—Madia soltó una carcajada por lo dicho—Sanemi debe querer pasar tiempo contigo.

—¿Por qué dices eso?—Pregunto, ruborizada evitando la mirada de Kocho.

—Es notorio que le atraes Madia y seguro tu también—Hizo saber.

Shinobu era quien más estaba enterada de los secretos de Madia, era como una hermana para ella. Sabía que mantenía un enamorado secreto y que era Sanemi.

—¡Shinobu!, ¿Cómo dices eso?, estas loca—Seguía ruborizada por lo dicho.

—Bien bien pero dime algo—Pidio en tono serio—¿Por qué buscas a la señora Tamayo?, y por que cada demonio que estas asesinando siempre preguntas lo mismo, "¿Dónde esta Kibutsuji ____? "—La seriedad de Madia se hizo presenté en su rostro que ya no mostraba una sonrisa—¿Quieres matarla o que vuelva a ser humana?—Pregunto esperando respuestas.

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Narra _____
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Las hojas realizaban una danza al caer al suelo chocando con el resto de las hojas que ya yacían en el suelo.

La tranquilidad del bosque era lo que más me gusta durante el día, por la noche los demonios rodeaban el bosque completo esperando a su próxima presa y lograban molestarme al tenerlos tan cerca.

Los libros de la casa escondida de Muzan lograban hacer que adquiriera más información sobre esa mujer misteriosa en la cual estaba tan interesada.

Un sonido de un fuerte viento provocó que quedara alerta.

—Creí que habías terminado ese libró—Escuche.

Cerre el libro para alzar la mirada.

—Sigues rompiendo las reglas—Le recordé—¿Por qué volviste, Kiyojuro?, podrían descubrirte.

—No te preocupes—Dio un salto, quedando junto a mi—No se percataran de mi ausencia.

—Me contaste de tu hermano Senjuro, ¿No sería raro que en un día sin misiones desaparecieras?—Pregunté dejando pensando a Rengoku.

—Senjuro estara bien—Sonrio dulcemente hasta sentarse junto a mi, quedando a pocos centímetros.

Durante el último mes Kiyojuro había estado regresando continuamente al bosque donde solía descansar, su presencia provoca que no me sienta con la soledad que acumule durante años, simplemente me siento acompañada.

Me gustaría que esta tranquilidad no sea interrumpida ni destruida, esta burbuja de amistad es bastante agradable, no me gustaría que esto fuera una trampa para atraer a los pilares hacia mi.

—Siempre te pillo en otro lado cada vez que nos encontramos—Chequeo los dedos Rengoku delante de mi rostro—¿Sucede algo?

—No, nada solo pensaba en lo que ha pasado el último mes. ¿Qué pasaría si te descubren?—Pregunté esperando su repuesta pacientemente.

—¡Tengo entendido que me castigarian por traición!—Respondió aún sonriendo. Desearía ser tan positiva como el—Porque eres la segundo demonio más buscada debajo de Muzan.

¿Demonio?, escuchar esa palabra y saber que trata de mi, me duele, es por eso que mi hermana me odia.

—¿Dudas de mi?—Preguntó de repente—Se que si pero no le dire a nadie sobre que te he estado viendo—Hizo saber con un aura de confianza.

—¿Enserio no dirás nada, Kiyojuro?, yo confío en ti—Confese, con un movimiento de cabeza asintió.

Creo que Rengoku había logrado ganarse mi confianza, habían pasado dos meses y ninguna cazador supo de mi paradero.

—Tengo una duda, ____—Deje de observar los párrafos del libró para alzar la mirada y encontrarme con los ojos de duda de Kiyujuro—La maldición de Muzan afecta a los demonios cuando dicen su nombre pero te he escuchado pronunciar su nombre muchas veces y nunca te afectó, ¿Por qué?

—Se supone que la maldición de Muzan afecta a los demonios que el creo, he visto a muchos de ellos morir por decir su nombre, en cambio a mi jamas me ha hecho ningún efecto. Quizas sea sólo por voluntad de Kibutsuji matar a quien diga su nombre—Dije pensando que era lo más obvio.

Esperaba no morir hasta poder entender lo que me atormentaba.

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¡Hola!, ¿Cómo están? Espero que bien.

Les dejo este capitulo que esperó que les haya gustado.

Pense en hacer la relación entre Rengoku y ____ un poco más lenta pero creó que lo haría algo aburrido, por esa razón el saltó de tiempo de 2 meses.

¿Alguna pregunta o duda? Las responderé con gusto.

Si tienen sugerencias las aceptó.

¡Nos vemos!