DEJAME AMARTE.

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Cuando llegaron a la habitación, Los besos entre Kara y Lena se hicieron mas apasionados, la rubia limpiaba las lagrimas que caian de esos verdes ojos—no llores mi amor, no lo hagas—le susurro agitada acariciando su rostro.

--es que yo, yo pensé que tu...--

--¿ que me iba a ir?, no cariño, eso seria lo ultimo que haría, también estoy aterrada, estoy aterrada por que no se como ser una buena madre, pero se que juntas lo lograremos—

Lena asintió sonriendo y nuevamente volvieron a besarse, ambas aun se encontraban con sus ropas y ya habían comenzado a estorbar, pero Kara se sentía tan feliz que se encargaría de volver loca a su novia, ella podía esperar.

Continuaron besándose en la cama, Kara se encontraba sobre su novia, hasta que la rubia sonrio con malicia al notar como las caderas de la pelinegra se movían pidiendo mas, se incorporo un poco y retiro su camiseta y su sosten dejando al descubierto sus perfectos abdominales, Lena se mordio el labio y se sento quitándose su blusa con rapidez, y despues retiro su sosten, las manos de Lena intentaron quitar el pantalón de Kara, pero la rubia la recostó y se acomodo entre sus piernas volviendo a besarla, un escalofrio la recorrio cuando dio una embestida y escucho el jadeo proveniente de Lena, sus ojos estaban obscuros por el deseo queriendo mas, pero Kara un no pensaba dárselo, entre besos las caderas de Kara se movían frotándose contra la intimidad de su novia haciéndola desear mas, pero no contaba con que de un ágil movimiento Lena la empujaría sobre la cama y se subiría sobre ella a horcajadas--¿ crees que no se lo que haces Zor-El?—hablo la pelinegra con voz temblorosa comenzando a mover sus caderas sobre la creciente ereccion de la rubia, se separo un poco retirando su pantalón pijama que se habia puesto desde que llego quedando en ropa interior blanca, en la cual se podía ver su humedad, Kara mordio su labio inferior deseosa y desabrocho sus pantalones, cuando también iba a bajar sus boxer Lena la detuvo—ahora me toca a mi—ayudo a quitar los pantalones de Kara dejandola solo en su boxer gris, en el cual se comenzaba a notar su ereccion, Lena no lo pensó dos veces y se subio sobre ella sonriéndole con malicia, y comenzó a frotarse sobre el miembro de la rubia la cual disfrutaba de la vista haciendo que se pusiera cada vez mas dura, el rose de la ropa sobre su miembro se sentía bien, pero ver como Lena se humedecía cada vez mas, la estaba llevando a otro nivel.

--carajo, sabes como ponerme dura con rapidez— sus manos acariciaron los muslos de Lena hasta llegar a su cintura ayudándola a moverse sobre ella—no sabes como me encanta que te frotes sobre mi—la ojiverde sonrio y sus manos se dirigieron a sus pechos comenzando a tocarlos, los sentía sensibles, pero su excitación se lo pedia, Kara notaba como en su boxer gris habia partes mas obscuras, la cual era su excitación mostrándose, y no solo la de ella, podía ver como la de Lena traspasaba su delgada ropa interior, la rubia soltaba ligeros jadeos cada vez que Lena se restregaba sobre su miembro.

--¿ me deseas Zor-El?— pregunto con malicia, sabiendo que Kara estaba apunto de perder el control.

--ujum.. – respondio la rubia alzando sus caderas para embestirla ligeramente, estaba ansiosa por sentirla sin ropa, pero dejaría que Lena se divirtiera, ver como restregaba su centro sobre su miembro, ver su rostro mordiéndose el labio inferior con sensualidad, la estaba desquiciando, tanto, que sentía como en cualquier momento se vendría, y Lena no le daba tregua, continuo moviéndose sobre ella en círculos justamente estimulando su glande.

--Len, amor..... vas a hacer que me venga..— gruño la rubia moviendo sus caderas al ritmo de Lena.

--¿ te gusta que haga esto?—pregunto la Ceo con malicia.

--me encanta mi amor—Lena sonrio y comenzó a moverse mas aprisa—Len.... Detente.. o si no... ahhh amor—gruño la rubia con los dientes apretados dando tres embestidas sintiendo como su liquido salia de ella dejando una enorme mancha en su boxer.

EL FUEGO DE TU AMORDonde viven las historias. Descúbrelo ahora