CUMPLEAÑOS 2

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Diana vio el rostro de la cumpleañera con una sonrisa torcida, entendiendo perfectamente lo que sucedia, y no la culpaba, Nia era una chica guapa, y recordaba que ella tuvo un flechazo asi cuando era pequeña, se enamoro perdidamente de uno de los trabajadores de su abuelo, pero el hombre le llevaba muchos años--¿ por que suspiras Prince?—pregunto Asami acercándose hacia ella, Diana solo le señalo con la mirada haciendo que la Sato sonriera—oh carajo, se ve que es una buena chica, pero presiento que alguien la hará mierda—exclamo viendo como Alex acribillaba a unos chicos con una pistola de agua.

Sam estaba algo confundida viendo como su retoño estaba estatica frente a Nia con la mano extendida, camino hacia ella parándose junto a Ruby—hija, ¿ estas bien?—

Ruby solo solto una risa algo extraña mientras su mirada boba seguía sobre Nia—espero no haber llegado tarde señorita Arias, solo venia a dejarle su regalo a Ruby, lamento no poder quedarme, es mi dia libre y ya tenia planes—Nia sonrio aun mas viendo a la adolescente—te vez muy linda hoy Rubs—

La nueva sonrisa tonta que Ruby solto llamo la atención de Sam--¿ ruby?—la llamo tocándola de el hombro—te están dando un regalo—La mano temblorosa de la adolescente se elevo hacia el regalo tomándolo--¿ como se dice?—la reprendio Sam.

--tendremos dos hijos—balbuceo haciendo que Sam alzara una ceja sin entender.

--¿ que dijiste?—

--gracias—hablo la adolescente derritiéndose al ver la sonrisa de Nia, pero su cuerpo se paralizo y su cerebro fallo cuando la asistente se acerco a ella dándole un cálido abrazo.

--feliz cumpleaños Rubs—le susurro en el oído dándole un beso en la mejilla, Nia se separo despidiéndose con la mano.

Sam vio a su hija con preocupación--¿ ruby?—hablo preocupada notando el rostro extremadamente rojo de su hija—oh mierda, comiste demasiados dulces de sandia—exclamo asustada—cuando tenia 6 años se comio cuatro cajas de dulces de sandia, duro dos días con diarrea roja y con olor a dulce, su trasero se puso tan rojo que parecía mandril—

Nia vio a la chica ponerse aun mas roja, le regalo una sonrisa y volteo a ver a Sam—hasta luego señora Arias, nos vemos el lunes— se despidió con la mano dándose la media vuelta para yéndose.

--¿ ruby?—hablo Sam notando como ahora su hija se ponía un poco morada--¡ Ruby respira!—grito comenzando a moverla de los hombros.

Lena estaba sentada a lado de una rubia desparramada en una silla con su abdomen muy abultado, el ceño fruncido y un terrible puchero de molestia—parece que la embarazada eres tu—se burlo Lena de su novia al ver su condición.

--no me hables, estoy molesta—contesto la bombera volteando su rostro hacia otro lado.

Lena solto una risita y acaricio la rubia cabellera de su novia—mi amor, no puedo comprarte otro estomago para que sigas comiendo—

--si, si puedes pero no quieres—contesto cruzándose de brazos.

Lena ya no podía con la ternura que su novia le daba haciendo berrinches por que quería seguir comiendo y no podía, aparte de que le habia prohibido subirse al trampolín ya que terminaría vomitando.

Asami se encontraba acariciando su vientre con una enorme sonrisa, cuando su novia llego corriendo frente a ella emocionada--¡ mira!—le grito señalándole su frente con una enorme sonrisa—Leslie me pinto una mariposa—

La Ceo se cubrió la boca para no reir—cariño, eso que tienes en la frente no tiene forma de mariposa—

--pero Leslie dijo que si—susurro agachando su mirada haciendo un puchero.

EL FUEGO DE TU AMORDonde viven las historias. Descúbrelo ahora