EL FUEGO DE TU AMOR

ELIZA.

La vida habia sido muy difícil para Alex, hasta ese dia.... Donde su sueño mas grande se habia cumplido, ser madre.

--Felicidades, tienen dos hermosos pequeños, un niño y una hermosa niña muy especial, muy sanos, de buen peso y medida—exclamo el pediatra haciendo que Alex sintiera una enorme calidez en su pecho y que las lagrimas inundaran sus ojos.

--Alex—la llamo Sam con una sonrisa débil.

Alex se sentía incapaz de despegar sus ojos de las dos figuras pequeñas que estaban siendo limpiadas para presentárselos a su otra madre.

La agente con manos temblorosas se acerco hacia Sam, sus castaños cabellos estaban pegados en la frente debido al sudor, líneas de lagrimas secas se encontraban en sus mejillas, pero la sonrisa no se podía borrar de sus labios—hola—saludo Alex a su mujer acercando sus labios para darle un dulce beso en la frente.

--no me beses—exclamo Sam con ojos entrecerrados—estoy toda sudada—

--mi amor, si beso tu cuerpo sudado cuando hacemos el amor, que no te bese por que acabas de darme el mejor regalo de mi vida—

La Ceo se sonrojo cuando escucho aquello—ahorita no me recuerdes eso, ya que hacerlo nos metio en todo este embrollo—exclamo intentando reir, pero hizo una mueca cuando el obstetra continuaba entre sus piernas--¿ ya termino de revisarme los intestinos?—pregunto con molestia en su voz, el doctor solo se sonrojo y continuo con su trabajo.

--lo siento, tengo que sacar la placenta y hacer un raspado para no dejar residuos—

--vamos a conocer a mami—el pediatra y una enfermera tomo a los pequeños envueltos en aquellos campos quirúrgicos azules—aquí esta su hermoso hombrecito—Alex tomo la mano de Sam y lagrimas de emoción salían de sus ojos.

--es hermoso—susurro viendo los castaños cabellos y unos hermosos ojos color avellana.

--y aquí esta la hermosa princesa—

Anteriormente, Sam se habia sometido a unas pruebas hormonales, donde se detecto que seria madre de una hermosa pequeña con la condición de alex, y un hermoso pequeño.

--oh por Dios...-- susurro Sam viendo a su pequeña hija.

En la sala de espera, Ruby estaba algo confundida con la mujer que estaba frente a ella--¿ por que se apellida igual que la pistola chueca?—

Eliza alzo una ceja al escucharla--¿ tuviste algún desafortunado encuentro?—

--ni me lo recuerde—exclamo Ruby cerrando los ojos con rostro de asco al recordar la vez que vio a Alex desnuda.

--soy la madre de Alex—exclamo Eliza con una sonrisa—me platico lo emocionada que estaba por su nueva relación y los nuevos pequeños—

Ruy fruncio su ceño un poco--¿ y por que nunca nos habían presentado antes?—

--oh bueno, he estado viajando por el mundo estos últimos meses, y calculando las fechas, sabia que en estos días seria el gran dia—Eliza sonrio al ver la desconfianza de la adolescente—me alegra saber que Alex tiene cercas personas que la aman y la cuidan, por cierto, que guapa esta tu novia—

Los ojos de Ruby casi se salían de sus orbitas, su rostro se enrojecido mucho mas que con los dulces de sandia, su cerebro se crakeo y su cuerpo perdió la capacidad funcionar, no sabia como meter aire a sus pulmones, inclusive hasta su saliva decidio irse por su traquea haciendo que comenzara a toser, Nia volteo a verla preocupada dándole golpecitos en la espalda.

--¿ estas bien cariño?—pregunto Eliza preocupada al ver a la adolescente de esa manera.

--¿ mamá?—Eliza dejo de ver a Ruby para dirigir su mirada hacia donde provenía aquella conocida voz--¡ MAMI!—grito alex lanzándose hacia los brazos de su progenitora.