IJWFYL [COMPLETA]

Capítulo 59

En la entrada del apartamento hay un tramo bajo de escaleras para cambiarse de zapatos.

Fu Yangxi se puso de pie sujetando el armario de los zapatos, Xiao Li levantó la silla de ruedas y Fu Yangxi saltó sobre un pie.

Miró a Zhao Mingxi y trató de parecer guapo, pero ¿cómo se puede parecer guapo con un pie rebotando?

Sintiéndose un poco avergonzado, Fu Yangxi murmuró disgustado: ―¿Quién diseñó semejante tramo de escaleras?

Mingxi se asustó mientras miraba, e inconscientemente levantó la mano para sostenerlo por un tiempo, temiendo que el suelo de baldosas estuviera demasiado resbaladizo y provocara una segunda caída.

Pero Fu Yangxi no sabía si su intención era mostrar su mano o no, pero no dejó que le ayudara y completó la serie de movimientos de forma fluida.

Mingxi: ―......

Después de levantarse de un salto, Xiao Li se apresuró a empujar la silla de ruedas detrás de él.

Sujetó el asa, se sentó de nuevo en la silla de ruedas, cruzó la pierna escayolada y se esforzó por enderezarlo, luego levantó sus bonitas cejas y miró a Zhao Mingxi.

Mingxi: ―......

¡¿Qué tiene eso de bueno?!

Después de que Fu Yangxi recibiera el alta del hospital, se encontró con un problema.

Si la fractura estuviera en su mano izquierda, estaría bien, una mano no afectaría al problema, pero la fractura estaba en su tobillo.

Podía saltar sobre un pie, pero le resultaría muy difícil entrar en el baño para ducharse.

Mingxi hizo esta pregunta.

Xiao Li dijo: ―No te preocupes, el Viejo Maestro ya ha encontrado un cuidador para el Joven Fu ayer, estará aquí más tarde. También estoy de guardia las veinticuatro horas del día.

Fu Yangxi estaba acostumbrado a estar solo en el exterior y, obviamente, era reacio a dejar entrar a un acompañante. Se le puso la piel de gallina al pensar que alguien tan alto como él, que medía más de 1,80 metros, tuviera que ser ayudado a levantarse y tener contacto físico.

Frunció el ceño y giró su silla de ruedas hacia el sofá, con cara de pocos amigos: ―¡Métete en tus asuntos, te he dicho que puedo hacerlo con muletas!

Xiao Li se apresuró a decir: ―Esto también es el cuidado del Viejo Maestro, Joven Maestro, no debes decir eso delante del él, provocará una nueva pelea más tarde.

Mingxi puso su mochila escolar en una de las sillas y sugirió desde un lado: ―¿Qué tal...?

Los dos hombres la miraron al unísono.

―No hay necesidad de contratar a un cuidador, yo lo haré.

―......

Xiao Li se sorprendió: ―¿Segura que estás dispuesta?

Xiao Li había pensado que Zhao Mingxi estaba simplemente en el amor temprano con el Joven Fu, sólo disfrutar del dinero y otros beneficios que vienen con estar en una relación con una tercera generación rica, ¿cuál era la necesidad de cuidar de la persona personalmente?

Xiao Li debe admitir que esto era algo fuera de lo común para él.

―¿Qué no estoy dispuesta a hacer? No es difícil ―Mingxi realmente no sabía lo que Xiao Li estaba pensando, suponía que estaba pensando en que quería ganar una parte del dinero como cuidadora.