La Mafia Wayne

33

Las lágrimas ya no podían caer más, lo había perdido todo, a su madre, a su nueva familia adoptiva, la terrible cuidad en la que vivía, sólo había un lugar al que podía correr para sentirse segura.
Aquel orfanato que fue su refugio durante años, pero al llegar vio algo que apretó su corazón, dos hombres metían a cada niño en una camioneta completamente cerrada, los niños parecían asustados, lo que la hizo correr en dirección al chico moreno, con intención de apuñalar al que estaba más cercano a la puerta del auto.

- ¡DÉJALOS!- los niños que aún no subían a el autobús se amontonaron frente a ella tomándola de los brazos para llevarla directo al camión.

- ¡van a sacarnos de aquí!- grito un niño que caminaba frente a ella con apuro.

- van a llevarnos a metrópolis para que el no pueda hacernos daño.- susurro una de las niñas que la tomaba del brazo.

- ¡tienes que venir con nosotros!- así fue arrastrada asta uno de los asientos del bus, donde la mayoría de los niños estaba.

- ¡Jason está en camino!- atreves de la ventana una rubia de traje púrpura apuraba a los niños que quedaban fuera del camión.

- ¡ya estamos todos!- grito el chico moreno de traje amarillo, subiendo al haciendo del conductor de aquel camión.

- "Barbara está esperándolos, dense prisa hay un tipo de traje bicolor a unos 40 metros de ustedes, está siguiendo un rastro de sangre que va a ustedes."- la voz de Conner alertó al moreno las gotas de sangre seguían asta la niña que acababa de llegar.

- vete con los niños Duke.- hablo la rubia con autoridad, pero el camión no dio señales de estar avanzando.- ¡Vete!- el motor se encendió, más no avanzó.

- Tim no puede quedarse aquí, el puede ser muy inteligente pero no tiene un entrenamiento físico muy bueno.- a pesar de la mala mirada de la rubia, no estaba seguro de irse sin el aún adolecente.

- "Esta a 23 metros, si no se van ahora los niños van a salir heridos."- sin más remedio y aún dudando a montón el camión avanzó a una velocidad moderada, maldiciendo a más no poder a los al Ghul y sus trucos sucios.

- el tiene razón, mi entrenamiento no es tan bueno en combate.- nervioso al escuchar rápidas pisadas saco su bastón, era fácil procesar la información a gran velocidad, pero nunca entró a un terreno con peligro real.

- si Bruno te dio ese traje es porque estas listo, el no hace las cosas sin premeditarlas al menos 5 veces.- le dio una mirada de reojo y al verlo tan tenso le sonrió.- yo creo que estas listo para esto.- atentos al ruido de la silenciosa cuidad, se lograron escuchar pasos rápido a a la distancia.

- ¡¿donde está ella?!- la sangre terminaba a los pies de ambos chicos.- ¡¿donde  tienen a Rose?!- antes de dar un paso si quiera, una camioneta lo empujó fuera del alcance de ambos chicos.

- ¡cambiemos de lugar rápido! Bruno está en problemas.- bajo apurado de la camioneta, dejo que la rubia tomará su lugar y miro al asustado chico a su lado.- no está muerto si es lo que es tas pensando.- una camioneta paro a unos pasos de ambos, la puerta se abrió para dejar libre al chico subir.

- "chicos tengo problemas aéreos necesitan moverse ya."- destellos rojos comenzaron a verse entre las nubes grises de cuidad gótica, pero como si todo estuviera en contra, grandes nubes negras llegaron.

- "canario negro llevará a los niños en el helicóptero."- la voz de Tapia se escuchó en cada integrante, se podían oír los motores de fondo y aspas preparándose para irse.- "pisen el acelerador, se va en 5."- con sólo intercambiar miradas las dos camionetas se fueron, dejando marca a de las llantas y un rugido de motor que asusto a los niños.

- ¡Jason!- con la agilidad tosca que lo caracterizaba subió a la moto que pasaba a su costado, con algo de suerte y el nuevo había dejado la carga especial en el edificio acordado.

Maldecía a aquel inútil que diseñó la cuidad, 4 orfanatos y ninguno estaba cerca del maldito parque más famoso de la ciudad, ¿Qué acaso no los llevaban a la feria el día de los mocosos? ¿De que servía invertir tanto en esos edificios si muy apenas y se usaban las camas?
No sabía si alegrarse de que sus padres estuvieran vivos o agradecer la gran debilidad que tenía Bruno con los niños.

El tiempo le parecía eterno, apresar de que la máquina daba todo lo que podía, no se sentía ni cerca de alcanzar al chiquillo malcriado que robaba sus galletas o al hombre que lo llevaba a terapia, cuando la cantidad de árboles comenzó a aumentar sintió el aire volver a sus pulmones, si bien sabía lo imprudente que sería tomó dos pistolas con silenciador tenía 6 balas en cada pistola y 4 cartuchos, pero tenían que seguir a pie si querían la ventaja de la llegada sorpresa.
Así que ya más cerca de su objetivo, con dos golpes al costado del pelirrojo, lo entendió, bajando la velocidad para parar en el edificio más cercano.

- no llames la atención, por ahora seremos la sobra del viejo asta que los demás lleguen.- dejo en las manos del pelirrojo una de sus preciosas, confiaba en el pelirrojo asta su vida, así que dejarle su precioso regalo de cumpleaños no era problema.- tenemos la ventaja si piensan que está sólo.- de su extraño traje saco una pistola de gancho y la entregó, necesitaba ser rápido y ver que rayos estaba pasando.- llamaré a Alfred para pedir los refuerzos apenas lleguen los demás.- el viejo mayordomo escuchaba todo atento, la gran pantalla de la cueva mostraba por lo menos 12 cámaras diferentes, y su mano estaba impaciente sobre un dijo cristal que ocultaba un pequeño botón amarillo.

Pequeñas gotas empezaron a tocar el suelo, dos jóvenes se elevaron en el silencio de aquella tarde gris, un hombre callo al suelo con sangre en el pecho, con una mirada llena de orgullo y cariño dirigida a la persona frente a él, con una sonrisa, la sangre salía de su boca, y una katana estaba perforado su pecho.

Por primera vez en su corta vida, la cara de aquel chiquillo malcriado se desfiguro en pena pura, escuchando aquel último murmullo que le dejaría una carga emocional, la mirada llena de soberbia desapareció, apagando la pequeña luz que su familia le había dado.

¿eso conllevaba a convertirse en un al Ghul?

Nacer con ideas de grandeza, puliendo el potencial de un niño asta su adolescencia y vivir eternamente, joven, fuerte y defender algo a esos extremos, planeando muertes asta de tu familia sólo...

Por un bien mayor.

- era su destino Damián.- el susurro atrás de su oreja ya no lo asusto, su mirada estaba pérdida en a que cuerpo arrodillado frente a ellos, aún con esa sonrisa triste pero cargada de cariño, esperando algo aún en su últimos segundos de vida.- es lo que le pasa a los blandos como el.- la voz de su abuelo mostraba desprecio, miraba al hombre con desdén, era sólo otro cuerpo sin vida.- por eso Debes volver conmigo, tu eres el elegido Damián te esperan grandes cosas a mi lado.- era sólo otro cuerpo sin vida...