La Mafia Wayne

18

Bane miro sutil al su jefe, este no lo miro de vuelta sólo miro al hombre bajo sus brazos, este estaba enojado pero débil, la mujer maravilla no daba señales de llegar Y los demás integrantes de la Liga no estaban, la mujer Halcón estaba tendida en el suelo y el linterna aún no podía reaccionar, se habían confiado.
Un disparo en la frente de un hombre llamo la atención de los oficiales, donde un muchacho con máscara roja tiraba el arma que había dañado al oficial.

- te atreves a difamar el apellido Wayne.- con su confiable gancho logró llegar frente a su padre, sabia que bajo la mascara los intensos ojos azules lo miraban con reprimenda, la mandíbula tensa se lo confirmaba.- yo soy el ultimo Wayne, no puedes montar este teatro con todos estos fenómenos y decir que eres el sucesor de mi herencia.- la mirada incrédula de los mirones no sabía dónde caer, querían respuestas, respuestas que no tendrían.

- dejen de lamer sus bolas.- en medio de los hombres callo una flecha, de las sombras salió una encapuchada de traje púrpura y cabello rojo.- saben que el apellido no les pertenece.- el hombre de negro miro con intensidad al de máscara roja pero no recibió respuesta alguna.

- es hora de que el mundo conozca al verdadero Wayne.- una rubia de traje negro se puso a lado de la pelirroja cargando una túnica negra con una W dorada bordada, Bruno se sorprendió, esa túnica...

- yo soy Wayne, el último hijo legítimo de Sangre Negra.- de las sombras salió un hombre, su cara era tapada por una extraña máscara de demonio ambas mujeres acomodaron la túnica sobre el fino traje de seda.

- ¡mientes!- grito el payaso histérico, miro con súplica a el amo que adoraba.- es mentira, yo te vi ese día, he compartido mis victorias contigo ¡dime que miente!- más su amo no respondió, sólo miraba atento al nuevo individuo que se proclamaba el último Wayne.

- revela tu identidad.- un lazo ató al hombre de la túnica, más este se quedó pacífico en su lugar mientras las damas a su lado se lanzaban a atacar a la amazona, pero Diana ya no tenía paciencia para nadie y las mando a volar con sus brazaletes.

- ¡Red hood!- rugió el de kimono extravagante.

- las tengo viejo.- el muchacho se movió rápido y con su pistola de gancho ayudó a ambas mujeres a aterrizar frente a ellos.

- ¡el lazo de la verdad te obliga!- con impaciencia ató al hombre que seguía en el mismo edificio, sereno sin importarle estaba atado.

- ese no es su lazo señorita.- la amazona callo en cuenta de lo traía en las manos, una cuerda normal, está sorprendida vio el lazo en las manos enguantadas de blanco donde permanecía su lazo.

- ¿como...?- asustada soltó la cuerda y trato de avanzar hacia el de la máscara demoníaca.

- baja mucho su guardia a los externos cuando está peleando enojada.- el hombre soltó un poco del lazo y lo vio con atención, la mujer no se movió de su lugar y esto lo noto aquel hombre.- esta ligado a ti, de alguna forma...- más que pregunta lo aseguraba, la amazona tembló ante esto y eso confirmó sus sospechas.

- podemos hablar tranquilamente, quiero ayudarte.- el hombre sujeto el lazo con una mano y la miro a través de la horrible máscara.

- retira a tu gente, dile al súper hombre que se tranquilice y ellos se irán.- la amazona negó derrotada, el hombre no dijo nada y sólo la miro paciente.

- tienen que ser interrogados, ellos son sospechosos y han atentado contra vida inocente.- se sintió incomoda con la vacía mirada de la máscara, sin más bajo lento, sorprendiendo a todos cuando está bajo apacible.- Superman.- el hombre de tóxico material no se movió ni un centímetro.

Más el payaso si, estaba cansado de tantos farsantes, su plan era perfecto, los tenía a todos donde quería.
¿Acaso querían llamar la atención as que el? ¡el se esforzó por que el hombre que admiraba lo reconociera! ¡era su momento!

- ¡este no es mi acto! ¡están arruinando mi plan!- molesto tomó su revólver y amenazó a la amazona con el, miro con molestia al hombre de largos cabellos.- ¡vas a explicarme esto aquí y ahora!- bastó sólo una mirada, para que el de casco rojo dejara inconsciente al payaso, quien maldijo antes de caer de lleno al suelo.

- ¡pudin!- el grito de la rubia se escuchó desde los edificios más altos.

- el hombre de arriba, ofreció quedarse si ustedes se van pacíficamente.- ante eso los cuatro que llegaron la miraron con intensidad a la amazona.

- Bane.- el nombrado soltó al enojado hombre de acero y se acercó apacible al de negro.- recoge este desastre y encarga te de llevar a el par de el desastre a su jaula.- aún con un ojo sobre el guardia de metrópolis tomó al inconsciente payaso y se adentro al edificio para buscar a la otra lunática.

- W-san...- cual fiera el hombre de negro se dio la vuelta para mirar a su joven lacayo, quien dio dos pasos hacia tras asustado.- yo...- agachó la cabeza cual cachorro asustado, mostró sumisión alejando sus manos de as armas que portaba.

- regresen a la cueva.- las dos chicas se pusieron a la defensiva dando un paso adelante.

- no hemos venido contigo, no responderemos a tus órdenes.- dijo la más joven de ellas, más la del traje negro se quedó tranquila.

- vámonos tres, el hombre a cargo dio una orden.- la pelirroja se quedó callada y siguió a la de negro asta el chico de chaqueta café.

- suban al auto.- mientras los jóvenes subían al auto se quitó su comunicador de la oreja.- dile a Croc que vuelva a su jaula.- se lo lanzó en las piernas antes de cerrar auto por dentro y por fuera.

- ¿qué? - el de caso rojo trato de bajarse otra ves y pico todos los botones que encontró, más la puerta no se abrió.- ¡viejo! - con sus confiables pistolas comenzó a golpear los vidrios, me estos no recibían daño alguno.- ¡no lo hagas! - paro cuando la mano enguantada se apoyó en el vidrio y el auto avanzó a una velocidad inhumana.

- tranquilízate Jason, ahora la prioridad es protegernos entre nosotros.- hablo la pelirroja mientras la misteriosa chica de negro quitó la maya que cubría su cabeza, mostrando su cabello corto y sus negros cabellos.

- ahora los Wayne en manos de la Liga de la justicia, Ra's al Ghul va a mover sus cartas.- hablo Cassandra con intranquilidad.- ahora tenemos que pensar en una forma de cubrir a Bruno con la prensa y cuidar de Damián.- tranquila de no tener que manejar se acomodo en el asiento, si bien robar no era sencillo, con el demonio que había en la mansión Díaz era casi imposible entrar.- con Bruno fuera del tablero, Ra's no va a quedarse de brazos cruzados.- si bien sabían que Damián podía cuidarse solo, también sabían que el pequeño amaba a su abuelo, llevárselo a sus dominios no sería difícil y mentirle no sería gran cosa si se trata de su padre.

- para eso tendrán que matarme primero.- el de rojo se quitó su casco y puso el aparato en su oído.- Croc, la misión falló, regresa a tu guarida sin hacer ruido.- lo único que recibió fue un gruñido.

Nadie sabía que bajo la mansión Díaz estaba la guarida del murciélago y nadie se esperaba, que está estuviera bajo el cuidado de 3 bestias, Killer croc, King Shark y su última defensa, la llamaban, la bestia roja del infierno, guardián del niño que era una mezcla peligrosa, un Wayne, un Al Ghul.