Zorina, la Reina Sangrienta

69 1 1
                                    

Zorina nació en Helia, muchos años antes de la ruina, en el seno de un pueblo de inmigrantes de origen Targoniano

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Zorina nació en Helia, muchos años antes de la ruina, en el seno de un pueblo de inmigrantes de origen Targoniano. Antiguamente arraigados al a cultura lunari, estos acabaron llegando a Helia por la persecución a su gente, siendo que finalmente dejaron de creer en la luna y perdieron su fe. Todos menos una familia en concreto.

Los padres de Zorina eran ocultistas, que frecuentemente buscaban la manera de explotar el poder místico que la luna poseía y de la cual se alimentaban los aspectos. En sus investigaciones dieron con un fenómeno conocido como la Luna de Sangre. Este era un momento específico en donde la tierra, el sol y la luna se alineaban y que ocurrió cada ciertos años. El matrimonio teorizó que durante este proceso el sol daba cierto poder a la luna, que combinados se reflejaban en la tierra, pero que a su vez era imposible de absorber. 

El matrimonio tenía tres hijos, Goudini (con gran habilidad para los juegos de azar), Kapuca (un experto en el uso de la espada) y Zorina. De entre todos su hija fue la única que nació con capacidades de aprender a usar la magia y por ello intentaron instruirle en el uso de esta por todos los medios posibles. La niña resultó ser una prodigio y rápidamente empezó a dominar conjuros de alto nivel a una temprana edad. Solo había un problema... era humana...

Temiendo que su cuerpo no pudiese soportar todo el poder de la luna de sangre, sus padres le obligaron a casarse con un hombre llamado Montenegro. Este era el líder de una familia también cultista, a los que engatusaron con el poder de la luna de sangre. El plan inicialmente era que Zorina fuese quien drenase los poderes de la luna y en vez de contenerlos los distribuyese entre los distintos miembros de la familia.

El ritual surtió efecto y Zorina y sus hermanos hermanos ganaron habilidades sobrehumanas. Junto a su familia fueron conocidos como los Sangrientos o Familia de Sangre, involucrándose a menudo en conflictos territoriales con otros clanes e incluso con los llamados Darkin. Sin embargo poco conocía Zorina de las intenciones de su marido, quien tenía una ambición mucho mayor que la que alguna vez sus padres tuvieron.

Montenegro dejó pasar el tiempo hasta que Zorina quedase embarazada y tuviese un hijo. Su plan era simple, realizaría un ritual mediante el cual uniría parte de su alma a su hijo y cuando llegase a cierta edad despertaría y tomaría el control de su cuerpo, aunque con todos los poderes de la luna de sangre. Zorina se opuso a esto, pero ya era demasiado tarde, su marido envenenó a toda la Familia de Sangre en una especie de suicidio colectivo, haciendo que sus almas vagasen por toda Runeterra mientras él aguardaba en el cuerpo de su hijo. Thresh.

Con lo que nadie contaba es que su hijo desataría la ruina, atrapando a Helia en un ciclo de muerte que aletargó la conciencia de Montenegro y la del resto de Sangrientos, que habían sido sellados en objetos místicos o tumbas. Zorina pasó a ser olvidada y tratada como una leyenda, hasta que siglos después su hijo despertó sus poderes y a ella en el proceso. Con una nueva luna de sangre por aparecerse, Zorina decidió que lo mejor era hacer acto de presencia y reunirse con lo que quedaba de su familia.

Archivo Personajes LORDonde viven las historias. Descúbrelo ahora