<Capitulo 34>

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Así como una canción alegra tu día, o una película cambia tu humor, una persona te cambia la vida. Nos guste o no, la llegada de una persona a nuestra vida nos produce algún cambio. Más allá de ser bueno o malo, el poder que tienen los seres humanos en cambiarnos es impresionante.

Tengo la suerte de tener a mi lado personas que me cambiaron para bien. Por empezar Nathalie, ella fue quien logro que dejara de ser un idiota mujeriego, logro que cambiara de parecer en cuanto al tema del amor y hoy la amo más que a nada. Hoy se que ella es todo para mi, y no me parece estúpido decirlo. Tiempo atrás me hubiera burlado de alguien que diría eso, pero hoy soy yo ese idiota enamorado que lo dice. Y ahora esta Nolan. Ese niño me cambio desde el momento en que me miro, y ni hablar de cuando me sonrió. Desde que lo conocí se instalo en mi mente y estuvo presente todos los días, y ahora esta aquí con nosotros. Cambiando nuestras mañanas, tardes, y noches. Esta aquí cambiando nuestra vida.

Aun recuerdo su sonrisa tímida cuando vio su habitación, recuerdo su emoción al ver su nuevo hogar, recuerdo lo feliz que estuvo el día en que conoció a nuestros amigos,  a su nueva familia. Son esos momentos los que se que voy a conservar por siempre en mi mente.

Ahora cuando llego al departamento, no solo me encuentro con la agradable sonrisa de Nathalie, sino que también siempre me sorprende un abrazo de Nolan. Salvo las veces que estaba enojado conmigo por no quedarme con él a ver las películas de sus súper héroes, hasta que le hice entender que tenia que trabajar, y estaba muy cansado. 

Y pensar que me burlaba de Hunter cuando tenia que soportar una y otra, y otra vez las películas de las princesas favoritas de Zoey, y ahora estoy en la misma situación que él. Ahora entiendo la posición de Hunter, no importa cuantas veces hayas visto la película, no importa cuantas veces hayas repetido una broma, no importa cuantas veces hayan cantado juntos una canción, si esa pequeña persona es feliz, tú eres el doble de feliz. Nolan sonríe, y yo sonrío aun más. Nolan ríe, y yo río aun más fuerte. Definitivamente me cambio la vida.

En estos momentos, Zoey se encontraba de visita. Nolan y ella se llevaron bien desde el primer momento. Nolan al principio fue un poco tímido, y lo que Zoey no tiene es timidez, así que lo hizo sentir cómodo y pudo sacarle esa timidez. Ahora que los observo dibujar y reírse, puedo asegurarme de que van a ser grandes amigos.

–¿Quién quiere merendar? –pregunto.

–¡Yo! –gritan ambos al unisono. Los observo desde la cocina y sonrío, ambos acostados en el suelo con muchas hojas a su alrededor, y los colores desparramados. Zoey disfrazada de Rapunzel, y Nolan de Iron Man, obviamente.

–Yo quiero cereal, tío.

–Cereal para Zoey –saco el cereal de colores favorito de Zoey.

–Yo quiero chocolate, papá –cuando estoy sacando el pequeño recipiente para los cereales, el mismo se me cae al suelo.

Papá... es la primera vez que Nolan me llama así. Desde que llegó me dice Paul. Es la primera vez que no me llama por mi nombre, y me siento... Guau ¡Me siento feliz, maldición! 

Miro a Nolan, y cuando se da cuenta de que lo miro me sonríe. Como si supiera lo feliz que me puso el que me llamara así.

Papá... Creo que ya tengo mi nueva palabra favorita. 

Me hubiera gustado demasiado llamar a alguien así, y provocar el mismo efecto que Nolan provocó en mi ¡Maldicion, quiero saltar y bailar!

Le preparo el chocolate a Nolan, y le sirvo el cereal a Zoey. Cuando todo esta listo, ambos corren hacia la mesa y me siento junto a ellos, observándolos reír, sonreír y hablar de temas de una forma inocente.

Di cuando (#2 A través de ti)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora