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Cuando has comprendido que no hay porque desgastarse por esforzarte en mantener una esperanza vana y que, debes comenzar a ordenar y soltar cosas que no aportan nada en tu vida es ahí cuando te das cuenta de que es momento de vivirla en una manera diferente.

O cuando comienzas a entender que podrías perder lo único que le da estabilidad a tu vida es cuando sientes como el abismo te empieza a consumir parte por parte, cayendo en vicios nocivos con tal de hacerte a la idea de que no le necesitas.

Esos vicios podrían ser el intento de llenar ese campo con otras cosas u persona, pero muy por el contrario nada de esto funciona. No existe persona, cosa o droga que pueda ayudarte, siempre caerás en ese circulo vicioso buscando el mismo resultado.

En este caso... ¿realmente comprendes que debes soltar o lo haces por resignación?

¿Qué tanto debes pasar para comenzar a valorar lo que te hace bien?

Sábado
5:00pm

El gran salón iluminado por luces vivaces y variadas estaba lleno de personas que se divertían y reían fuertemente, aunque la música ochentera intentara opacar sus risas. El ambiente era demasiado agradable, había familias, parejas y grupos de amigos.

Era una pista de patinaje con temática clásica ubicada en el centro comercial mas conocido de la ciudad, las personas solían frecuentarlo por la gran variedad de planes que ofrecía, siendo la pista uno de los principales.

—Quédate aquí, no tardo — dijo Hyunjin preocupado

—Oye, estoy bien — respondió el rubio entre risas

—No, estas sangrando. Siéntate ¿sí? No tardo.

El pelirosa salió dando grandes zancadas buscando un botiquín con lo necesario para hacerle curaciones a la rodilla herida de Jimin.

Mientras estaban en la pista y Jimin demostraba su gran habilidad en el patinaje, un niño se atravesó en su camino sin percatarse a tiempo haciendo que el chico por esquivarlo cayera con todo el peso sobre sus rodillas y manos lastimándose las heridas que apenas sanaban de aquel día del accidente.

El rubio se sentó donde le indico Hyunjin y con calma se quito los patines para descansar un poco, suspiro con calma perdiéndose entre la gente que jugaba en la pista. Estar entre tanta gente, escuchándolos reír y las luces de colores rodearle le hacia sentir en paz, una paz que no se había dado cuenta cuando dejo de sentir. Se sentía bien al estar en un lugar diferente al de su casa donde lo único que conseguía últimamente era atormentarse por pensar tanto, pero hoy gracias al peli rosa podía dejar de hacerlo, podía dejar de pensar por un rato en Yoongi. 

Tiro su cabello hacia atrás y con el dorso de su mano limpio el sudor que aun tenia en su frente, realmente se había esforzado al patinar, se había divertido mucho. Miro brevemente su rodilla notando como la sangre comenzaba a secarse, realmente no era para tanto como lo hacia ver Hyunjin. estaba exagerando. Sonrió negando con su cabeza al recordar el tremendo susto que se llevo el peli rosa al verlo caer mientras el reía. 

—¿Jimin? — escucho la voz suave y femenina tras de él. Se le hacia conocida. Se giro un poco encontrándose con la gran sonrisa de esa chica rubia.

—Jisoo...hola — dijo bajito observándola con detenimiento.

La chica amplio aun mas su sonrisa y con seguridad se acercó a él. Ella era tan hermosa, su piel siempre tan radiante, su sonrisa tan resplandeciente, su cuerpo tan atlético y su cabello tan impecable.

Ahora lo entendía.

—Qué casualidad ¿Cómo estás? — dijo Jisoo acercándose completamente con su sonrisa intacta

DESPUÉS DE TI[Yoonmin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora