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En fracciones de segundos sus memorias revivieron viéndolos tan lucidos y reales, recordando aquellos momentos tan preciados junto con sus padres y amigos cercanos.

Como los viajes de vacaciones con su familia, en ellos podía disfrutar al máximo a sus padres, sin trabajo, sin estudios, ni tareas, solo ellos.

O los días en los que simplemente se quedaba en casa viendo películas de comedia o románticas, con una gran pizza y coca cola. Para Jimin eran planes perfectos.

O la vez que conoció a su amigo Taehyung, ese chico extraño con una personalidad tan única que podría decirse que venia de las estrellas. El que siempre estaba al tanto de su bienestar y sin importar que siempre le brindaba los mejores concejos.

O la vez que conoció a ese chico de cabello oscuro y piel pálida, que a primera instancia no se cayeron bien, de hecho, se detestaban.

Jimin y Yoongi se conocieron en el ultimo año de la primaria, el pálido llego como alumno nuevo dos semanas después de iniciar clases. La primera vez que se vieron pudieron sentir al instante como algo en si se contraía y ellos simplemente lo asumieron como que no se agradaban. Los días y meses trascurrían y entre ellos los roces cada vez eran mas constantes, al punto de casi agarrarse en clase de educación física y es que Yoongi se sentía jodidamente atraído por molestar a Jimin, a veces parecía que iba a la escuela solo para eso.

Sus indiferencias pasaron a segundo plano cuando en una clase de química la profesora decidió juntarlos para realizar un taller, desde eso todo cambio. Jimin fue por primera vez a casa del mayor pudiendo notar como su familia en realidad no era una muy unida, su madre bebía mucho y su padre casi nunca estaba en casa y él creía que quizás ya podía entender un poco mejor las actitudes de ese chico, en realidad estaba solo.

Todo se hizo mas ameno cuando un día cualquiera el rubio quiso invitar al mayor a su casa a jugar y pudo notar el anhelo que Yoongi tenia por sus padres, es decir; podía notar como ese chico deseaba tener unos padres como los suyos y eso para el menor era muy triste, así que lentamente fue integrando al chico más y más a su familia y poco a poco sin darse cuenta ese chico ya estaba incrustado en su corazón.



𓇻 𓇻 𓇻

Su espalda y codos ardían mientras su mente aun daba vueltas, su corazón latía con fuerza y sus manos se aferraban al cuerpo de una persona extraña, podía notarlo. Su olor era desconocido pero agradable y le daba seguridad. Aun tenia sus ojos cerrados y se negaba a abrirlos debido al miedo. Su vida paso ante sus ojos como si se tratara de un cortometraje. Mostrando todas y cada una de sus mejores y peores facetas.

Noto como la persona extraña se removió un poco y poso una de sus manos sobre su cabeza dándole suaves caricias, con el miedo absorbiéndolo se aferró con más fuerza al cuerpo ajeno, sus lagrimas rodaban por sus mejillas y estaba comenzando a temblar.

­­­—¿Estas bien?

Escucho decir, la voz de esa persona era suave, linda, tranquilizadora. Suspiro con fuerza y con lentitud empezó a abrir sus ojitos que ya estaban rojos del llanto.

Entre la vista borrosa por las lagrimas y la curiosidad conecto su mirada con la de un chico que lo veía atento. Sus ojos rasgados, piel blanca, labios gruesos y definidos y su cabello largo de un color rosa. Sus lagrimas cesaron.

—¡Jimin! Mierda Jimin ¿estas bien? Mírame — dijo Yoongi al llegar corriendo hasta donde el estaba. Con sus manos temblorosas acuno el rostro del menor para mirarlo fijamente — ¿Estas bien? Por favor, di-dime que lo estas — sus lagrimas amenazaban con salir por mas que intentara ser fuerte.

DESPUÉS DE TI[Yoonmin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora